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León
Martes, 5 de septiembre 2017, 11:21
Cerraron con la llegada del verano y, al menos este curso, no volverán a abrir con el comienzo del nuevo curso. Los centros rurales agrupados de Lillo del Bierzo, Susañe del Sil y Santa Maria de la Isla no contarán de nuevo con alumnos ... en sus aulas al no llegar al mínimo establecido (son menos de cuatro estudiantes) para que se imparta clase.
Estos tres cierres chocan con las cifras que registra la provincia, que suma seis alumnos más con respecto al curso anterior, pasando de un total de 60.829 a 60.835.
Por contra, el CRA Los Adiles y el de Villacedré abrirán una nueva unidad educativa cada uno por la mayor demanda existente en ambas zonas.
Las cifras, para CSIF, muestran una realidad «frustrante» como apunta Javier Fernández, delegado sectorial de la central en León.
Tras la comparecencia del consejero de Educación, Fernando Rey, para presentar el nuevo curso, Fernández entiende que «se esconde más de lo que se muestra».
Y es que el cierre de los tres centros atiende a una despoblación «que se fomenta al no atender correctamente estas zonas rurales».
De la mano va un empleo que según CSIF «es precario y se busca que una profesión preciosa no lo sea tanto por el volumen de alumnos en las aulas».
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