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Vista actual del consistorio de Cistierna. Siro S. G.
Cistierna: 106 años del consistorio nuevo

Cistierna: 106 años del consistorio nuevo

Si existe un edificio notable en la villa de Cistierna, ese es el nuevo consistorio que inicia su construcción en 1919

Domingo, 16 de marzo 2025, 09:11

Si existe un edificio notable en la villa de Cistierna, ese es el nuevo consistorio que inicia su construcción en 1919. Desconciertan un poco sus dimensiones, casi de consistorio capitalino, sobre todo, por los días que nos ha tocado vivir, en cuanto a mengua y acabamiento de nuestra villa y de toda la Montaña de Riaño; aquí no se libra nadie de la sangría de personas y haciendas debido a las desastrosas y liliputienses políticas fiscales confiscatorias que nos aplican desde hace cuarenta años.

La desmesura del edificio, viene explicada por los tiempos en que se proyectó y diseñó. Cistierna, pasaba entonces por uno de los momentos de mayor auge y apogeo económico, derivado de la industria minera y del ferrocarril. Desde Cistierna, se gobernaba un concejo que comprendía además de los 9 pueblos actuales, todo el valle de Sabero, segregado el año 1927 a instancias de la todopoderosa empresa carbonífera y los caciques locales de ese valle, que deseaban evadir la tutela de Cistierna creando un nuevo ayuntamiento.

Aquel despegue económico, trajo un gran aumento de la población y el viejo consistorio, situado junto a la casa del industrial D. Sandalio Colmenares, quedó pequeño. Era necesario un edificio mayor, sobre todo, un edificio multiusos, que a la vez de tareas administrativas, fuese capaz de albergar el juzgado que se pretendía establecer en Cistierna, una biblioteca, y viviendas para maestros, el juez y el secretario del ayuntamiento. Entre las noticias que aporta el documento de contratación investigado por nosotros, destacamos las siguientes: el nuevo consistorio se levantaría en la plaza de la villa, según los planos presentados a la corporación; planos y proyecto elaborado por el arquitecto Blanch. Creemos que se trata del arquitecto de la Diputación de León D. Francisco Blanch y Pons, de nación catalana, casado con Doña Ángela Cornet, pariente del gran arquitecto Gaudí.

En cuanto a la descripción del edificio, observamos en el mismo, una planta rectangular, de la que sobresale un cuerpo central sustentado por nueve arcos escarzanos, flanqueado por dos cuerpos laterales. Al parecer, en el proyecto inicial, los arcos presentaban molduras decoradas con bajorrelieves esféricos. En el arco central, situado bajo el balcón principal, se contemplan aún esos relieves de esferas, decoración iniciada pero nunca concluida.

El edificio se distribuye en planta baja y dos pisos, separados en la fachada por dos entablamentos, el último piso situado sobre el cuerpo central era abuhardillado, con cuatro mansardas en la parte delantera del edificio que mira a la plaza, y nueve en la trasera que mira al poniente; las mansardas después de sucesivas reformas han desaparecido. Los nueve vanos del primer piso y cuerpo central, tienen dinteles arquitrabados; en el vano central hay un balcón que mira a la plaza, apoyado sobre dos ménsulas y decorado con motivos ornamentales formados por entrelazados curvos, característicos de la decoración modernista en boga durante esos años.

Año 1919 se echan los cimientos del cuerpo central, el cuerpo lateral derecho aparece con cubierta y un solo piso. Gentileza Milagros Corral

El resto de los balcones del cuerpo central, no sobresalen y ostentan columnas abalaustradas, todos ellos rematan en una cartela con moldura curva sin inscripción. Los ocho balcones de los cuerpos laterales, rematan en un frontón curvo. Presenta el edificio un aire clásico renacentista, acentuado por la sillería ligeramente almohadillada de los entrepaños, y por las cuatro copas, dos a cada lado del edificio, que sustentan grandes bolas esféricas. Los avatares de su construcción fueron muchos, e implicaron a las fuerzas vivas de la población durante los cinco o seis años que duró la obra.

El día 15 de Marzo de 1919, siendo alcalde constitucional de Cistierna el empresario minero D. Esteban Corral, en nombre del ayuntamiento, contrata en las mejores condiciones económicas las obras del nuevo consistorio. En cuanto al presupuesto necesario para obra de tal envergadura, tenemos que decir que fue uno de los principales quebraderos de cabeza para el ayuntamiento, y sobre todo, para el alcalde D. Esteban Corral. El 26 de Agosto de 1921, tras larga discusión en el pleno, se aprobaba un presupuesto extraordinario para la casa consistorial. En un principio se pidió un empréstito de 125.000 pesetas; más tarde, se solicitó otro por un valor de 375.000 pesetas hasta completar las 500.000 pesetas que se vieron eran necesarias para atender las obras que la corporación intentaba sacar adelante.

Hacía 1921 la obra prosigue, en la imagen la extraordinaria armadura de la cubierta obra de D. Nicolás Calzón. Gentileza Milagros Corral

Mientras llegaba el dinero del empréstito solicitado, D. Esteban Corral, anticipó para atender gastos de la obra, la cantidad de 125.000 pesetas. El ayuntamiento acordaba por unanimidad reconocer dicho crédito que había de ser reintegrado en el momento que se contratase el empréstito. Desconocemos la fecha exacta de la inauguración del nuevo ayuntamiento, pensamos que fue durante el verano del año 1923, pues el 11 de agosto de ese año se hizo un pago al pirotécnico que ofreció un espectáculo de fuegos artificiales para celebrar el evento, y otro pago a D. Bernardino Sagüillo y su cuñado D. Inocencio Recio propietarios del Moderno, por el banquete con el cual se regalaron concejales y fuerzas vivas de la villa; que ya por aquel entonces con el dinero del contribuyente se tenían este tipo de relajos y alegrías; por supuesto, sin llegar a los dispendios que actualmente algunos partidos gastan en mariscos y mancebías.

Y ahí sigue después de 100 años el ilustre consistorio de Cistierna, sobre este edificio ha pasado la revolución de 1934, la desastrosa y ominosa segunda república, la guerra civil, la dictadura de Franco y la monarquía parlamentaria con D. Juan Carlos I y D. Felipe VI. Como curiosidad, por si alguno quiere probar suerte, el ayuntamiento, por unanimidad, desde 1927 en adelante, se suscribía a jugar 50 pesetas a la lotería de Navidad a los números: 30.309 y 29.118. La otra lotería, que nos bajen algo los impuestos y cese el acoso confiscatorio a los industriales y autónomos, sería deseable que tocase alguna vez por estos lares, donde los servicios y comunicaciones cada año son peores, obligando al abandono de los pueblos y zonas de montaña.

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