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El comité de empresa de Mondélez ha mostrado este miércoles su «profundo malestar» por la demora en la negociación del convenio ante lo que califican una «actitud irresponsable» de la nueva dirección de la planta.
«La nueva dirección de la planta mantiene una ... actitud irresponsable con la representación de los trabajadores poniendo en peligro una larga tradición de entendimiento entre trabajadores y dirección de empresa, que ha traído años de paz social y estabilidad, muy beneficiosa para todos y que ahora deliberadamente esta nueva dirección trata de saltar por los aires», lamentan desde el comité de empresa.
Los sindicatos recuerdan que en enero de 2020, cuando se inició la negociación del convenio de empresa que había caducado en 2019, empezaron a ver «las dificultades que íbamos a tener para la negociación del nuevo convenio con una dirección de empresa nueva que se alejaba notablemente de la línea seguida por anteriores directivas».
«La negociación del convenio se ha visto retrasada en un año marcado por la pandemia que ha impuesto unos ritmos distintos», señalan desde el comité, algo que «asumimos y entendemos con absoluta responsabilidad, priorizando el cerrar filas como empresa para poder superar dicha situación», pese a que la empresa «no ha parado ni un solo día su actividad mostrando un grado de compromiso de todos los trabajadores a la altura de las circunstancias».
El comité de empresa explica que, una vez iniciadas las conversaciones, se han encontrado con una actitud de «ninguneo y falta de seriedad» en la dirección que «nos sorprende y nos molesta y que nos ha llevado a un punto muerto en la negociación de nuestro convenio» tras diez reuniones, dos de ellas en 2020 y ocho en 2021.
«Después de todo el esfuerzo estamos en el punto de salida de nuevo», lamentan los sindicatos, que reconocen que han ido reduciendo expectativas para desbloquear la negociación «dejando 14 puntos aparcados de las 28 iniciales, con un ahorro para la empresa cifrada por ella misma en 300.000 euros».
«No entendemos como de forma incomprensible, la empresa boicotea una tras otra las reuniones con evasivas y excusas que ponen en entredicho sus propios datos que reconocen que en el año 2020 tuvieron un incremento de la producción estimada de un 12%, y que por lo tanto no plantea un escenario económico desfavorable para el desarrollo de una negociación seria y responsable», explican.
Es por ello que, tras informar de la situación a los trabajadores, el comité de empresa valora iniciar «medidas de presión» para que las propuestas sindicales «sean escuchadas».
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