Borrar
El alcalde, Óscar Ancares, entrega a la madre de Sheila, Julia Fernández, un ramo de flores. B. G. H.
«El caso de Sheila está resuelto policialmente; queda juzgarlo», insiste la familia de la joven

«El caso de Sheila está resuelto policialmente; queda juzgarlo», insiste la familia de la joven

Reitera que «todas las pruebas conducen en la misma dirección» y señala al exnovio en el 16 aniversario del crimen, recordado en Degaña

BELÉN G. HIDALGO

Sábado, 25 de enero 2020, 10:34

Este 25 de enero, se cumplen 16 años del asesinato de la degañesa Sheila Barrero. La joven apareció muerta en su coche, con un disparo en la nuca, el 25 de enero de 2004 en el Alto de la Collada, en Degaña, ... cuando regresaba a su casa desde Villablino, donde trabajaba como camarera en un pub. Desde entonces, el Ayuntamiento de Degaña celebra un Pleno extraordinario cada año para condenar «el trágico suceso». El regidor, Óscar Ancares, en el acto institucional de ayer, señaló la «esperanza» y también la «desilusión» ante la dificultad de juzgar al culpable del asesinato. Tras la sesión plenaria, se guardaron cinco minutos de silencio frente a la Casa Consistorial, donde aún hoy ondean las banderas a media asta en señal de duelo.

Elías Barrero, hermano de la joven asesinada, aclaró que la familia a día de hoy no ha recibido ninguna notificación por parte de la Fiscalía, que insta al sobreseimiento provisional del caso por falta de pruebas. El Ministerio Público entiende que las diligencias practicadas «no resultan suficientes para situar inequívocamente al investigado en el interior del vehículo en el momento del crimen ni, por lo tanto, para determinar la autoría material del homicidio o señalar a una persona concreta ya no como autor, sino tampoco como cómplice o encubridor».

«Estamos a la espera de que se pronuncie la jueza. Creemos que con las pruebas que hay es más que suficiente para emprender un juicio oral», señaló Barrero, quien no dudó en hacer referencia a los residuos de disparo como evidencia. «Ese señor tiene los mismos componentes que el casquillo encontrado en el coche. Son idénticos. Disparó el arma, la manipuló o tocó el casquillo. Si el casquillo está en el coche y él estaba en su casa, que me expliquen cómo puede llegar eso a su mano», subrayó.

La madre de Sheila Barrero, Julia Fernández, no ocultó su agradecimiento por la investigación de los últimos años. La causa fue reabierta en 2015 para la práctica de nuevas diligencias en las que se aplicaron nuevos avances tecnológicos. Pero ella tampoco disimuló su sensación de «abandono» por parte de la Fiscalía. «La Guardia Civil volvió a analizar todas las pruebas e investigaciones y está resuelto el asesinato de Sheila. Da todo a la misma persona», puntualizó sin que le temblase la voz a la hora de señalar al exnovio de su hija, Borja V. G., único investigado por su muerte. Insistió que las pruebas lo sitúan en el asiento trasero del coche de Sheila Barrero y basó su explicación en los residuos de disparo hallados en su mano. «Él dice que fue de caza, pero lo descartan por completo. No tiene nada que ver los componentes que tiene de cartuchería metálica a lo de caza», reiteró la madre de la joven.

«Hasta el final»

Más disconforme se mostró Julia Fernández con la Fiscalía. «Me parece que la Guardia Civil y los laboratorios tienen una credibilidad. Si las pruebas no son válidas en el caso de Sheila, entonces no son válidas para nadie». La familia reitera que con «lo que hay el caso está resuelto policialmente, queda juzgarlo».

El hermano de la joven asesinada también se pronunció sobre las declaraciones de la fiscal superior de Asturias, Esther Fernández, quien manifestó que en la investigación inicial del caso no se practicaron una serie de diligencias y apuntó a la posible falta de medios técnicos del momento. La fiscal superior aseguró desconocer el motivo y afirmó que «después de trece años las pruebas se degradan y ya no es lo mismo». En este sentido, Barrero se mostró rotundo y apeló a la responsabilidad del Ministerio Fiscal en esa falta de diligencias. «Si en su momento se vio que faltaban diligencias, pudo haberlas solicitado», sostuvo.

Entre lágrimas, Julia agradeció el apoyo del Consistorio y vecinos, que cada año acuden a esta cita para mostrar su repulsa al crimen de su hija. «Esperemos que se haga justicia. Lucharemos hasta el final».

Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios

leonoticias «El caso de Sheila está resuelto policialmente; queda juzgarlo», insiste la familia de la joven