Controlado y en Nivel 0 el incendio de Castrillo de los Polvazares

Como la calma después de la tormenta y el silencio después del caos. La normalidad vuelve a presidir, al menos por el momento y sin perderle la cara al toro, en Astorga, Piedralba y Santiago Millas, las localidades afectadas por el incendio de Castrillo de los Polvazares.

La Junta de Castilla y León ha rebajado en la tarde-noche de este miércoles a nivel 0 el incendio que ha mantenido en vilo a toda la provincia.

En Astorga ya pueden respirar tranquilos por los pasos que se están dando: «Después de que ayer detuvieran al presunto autor estamos más tranquilos», reconoce José Luis Nieto, alcalde de Astorga.

El fuego, provocado presuntamente por un peregrino extranjero que se encontraba realizando el Camino de Santiago, arrasó un perímetro de 15 kilómetros en el entorno de la LE-6425. Dos días después sigue siendo vigilado por las brigadas correspondientes, aunque ya sin el riesgo ni el contrarreloj con el que operaban el lunes 19 de agosto. «Hay normalidad en todos los pueblos, huele mucho a humo, pero nada más», señala Nieto con alivio.

El viento se erigió como el peor enemigo de los medios que trataban de extinguirlo. Cercanos a los 30 kilómetros por hora, la temperatura también superaba los 30 grados, dos motivos que explican el rápido avance de las llamas. La incidencia de estos dos factores era tal que aunque el incendio estuviese en un punto alejado de viviendas, a poco que se complicase podría haber llegado a alcanzar alguna, con lo que ese miedo anduvo rondando siempre.

Aún así, la tranquilidad no lo es todo y en el kilómetro cero continúan trabajando cinco técnicos, seis agentes medioambientales, cuatro cuadrillas terrestres, dos autobombas y seis bulldozer. Entre todos suman 106 medios destinados en Castrillo de los Polvazares, donde además la UME se vio obligada a intervenir en un determinado momento horas después de la alerta.

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