León advierte de que no se rendirá en Puerto Pinos: «Ya no hay marcha atrás»

Así lo señala a El Comercio el abogado que lleva el caso de la parte leonesa, Carlos González-Antón: «Por supuesto que vamos a recurrir esta decisión», asegura. «Ya contábamos con que no iba a ser fácil. Pero nos ha sorprendido que el auto ni mencione las sentencias firmes. Pensamos que tenemos que llegar al Supremo y que el Tribunal Superior de Justicia de Asturias no se precipite como el juzgado. Jurídicamente hoy no hay margen para que un ayuntamiento ejerza competencias fuera de su término municipal por muchas escrituras de compra que tenga», señala en relación con la compra hecha por Mieres en 1926 de este enclave en León.

En concreto, la solicitud ha sido denegada por el juzgado en un auto fechado a 8 de este mes en el que destaca que las actividades que se desarrollan en el puerto y que serían objeto de esas medidas cautelares no suponen «efectos irreparables o de difícil reparación». En él se hace alusión también al hecho de que estas actividades de aprovechamiento de pastos son las previstas desde el momento en el que el Ayuntamiento adquirió los terrenos.

El letrado ya declaró que el caso de Mieres desarrollando competencias ganaderas en suelo leonés no tiene cabida en norma actual alguna. En 2015, por vía judicial, ya se logró el cierre de la Casa Mieres, el refugio y negocio hostelero que se había instalado en Puerto Pinos. De hecho, el texto de ese fallo, emitido en 2018 por el Juzgado de los Contencioso-Administrativo número 3 de León (sentencia refrendada por el Supremo posteriormente) determina que «no es preciso entrar a examinar la patente y radical nulidad de una norma jurídica aquejada de manifiesta incompetencia territorial y material cuya declaración no nos correspondería».

La chispa del último roce se desató cuando una treintena de ganaderos acompañaron al guarda del concejo para hacer un control del ganado que estaba pastando. Eso soliviantó a los leoneses. Mieres, por su parte, pide acotar los pastos.