La Junta insiste en que los casos de tuberculosis en la cabaña leonesa se siguen con especial atención.

La Junta asegura que cambiará el manejo de los casos de tuberculosis bovina si crecen los contagios

La Junta remarca que el manejo de la enfermedad son objetivos y subjetivos, como puede ser el tamaño de las explotaciones ganaderas, el número de brotes y la capacidad aislamiento de las cabañas de su entorno, así como el posible contagio a través de especies silvestres.

Leonoticias

León

Jueves, 2 de junio 2022, 14:18

La Junta de Castilla y León modificará su respuesta a los brotes de tuberculosis bovina si crece el número de casos o no se puede preservar el aislamiento, de acuerdo al protocolo para la erradicación de esta enfermedad, que establece diferentes actuaciones en función de ... las circunstancias.

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En la comparecencia posterior al Consejo de Gobierno, el portavoz de la Junta y consejero de Economía y Hacienda, Carlos Fernández Carriedo, insistió en que la Junta no va a cambiar el protocolo referido a la tuberculosis bovina, pero reconoció que si el número de casos cambia o no se puede establecer un perímetro de aislamiento, la decisión aplicada hasta ahora se puede modificar.

Elementos objetivos

En ese sentido, Fernández Carriedo indicó que los elementos que determinan el manejo de la enfermedad son objetivos y subjetivos, como puede ser el tamaño de las explotaciones ganaderas, el número de brotes y la capacidad aislamiento de las cabañas de su entorno, así como el posible contagio a través de especies silvestres.

¿Qué es la tuberculosis bovina?

La tuberculosis bovina es una enfermedad bacteriana crónica y debilitante causada por la infección por Mycobacterium bovis que afecta al ganado bovino y, en ocasiones, afecta a otras especies de mamíferos, tanto salvajes (jabalí, tejón) como domésticos (cabras, ciervos). La mayoría de los mamíferos pueden ser susceptibles.

Es una enfermedad animal de Declaración Obligatoria que afecta a las personas. Constituye un gran problema de salud pública a nivel mundial, sobre todo en países en desarrollo. Es una zoonosis importante, ya que las personas pueden infectarse por inhalación de aerosoles o por ingestión de leche no pasteurizada.

Los signos clínicos aparecen en los animales en la fase tardía de la infección y se caracterizan por un estado general de enfermedad con neumonía y fiebre baja fluctuante, debilidad, falta de apetito y pérdida de peso. Los animales infectados eliminan las bacterias a través de las secreciones respiratorias, heces y leche, principalmente. La transmisión se da directamente por contacto entre animales sanos e infectados o; indirectamente, por vía oral en la ingestión de piensos contaminados con secreciones de animales infectados, o aerógena en la inhalación de microgotas en forma de aerosol. Requiere de un diagnóstico en laboratorio para su confirmación.

La prevención y control se basan en el diagnóstico precoz y el sacrificio de los animales confirmados a través de los programas de erradicación, que han reducido o eliminado la tuberculosis en el ganado bovino. La completa erradicación se complica con la infección persistente en los animales silvestres, que actúan como reservorios. Es una enfermedad respiratoria grave presente en todo el mundo.

Asimismo, el portavoz remarcó que la Junta está siguiendo el mismo protocolo y criterio, que deciden los técnicos en función de las condiciones que se dan en cada situación. Por ello, insistió en que el Gobierno autonómico garantiza el cumplimiento de la Ley de Sanidad Animal, el protocolo de erradicación de la enfermedad y el Reglamento de la Unión Europea (UE).

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Preservar la salud de la cabaña ganadera

También, el portavoz de la Junta señaló que el objetivo es preservar la salud de la cabaña ganadera, y, por tanto, la de las personas, como indican el principio que inspira la profesión de los veterinarios, pero también garantizar el futuro de los ganaderos, al evitar que se sacrifiquen la totalidad de las reses de una explotación.

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«El protocolo no se va a cambiar», insistió Fernández Carriedo, pero señaló que el procedimiento que se aplica varía sin se modifican las circunstancias. «La prioridad es la salud de la cabaña ganadera», «el equilibrio con el futuro de la ganadería», como condición previa para la salud pública. «La salud del ganado, es la salud del pueblo», apostilló.

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