La juez aprueba nuevas diligencias sobre el caso de Sheila Barrero, asesinada en 2004

Fue el 2 de agosto cuando Fiscalía solicitó la práctica de estas nuevas diligancias, que consisten en la declaración como peritos de diferentes personas.

Se trata de una serie de declaraciones que se celebrarán en sede judicial en el mes de octubre. Acudirán para dar testimonio un facultativo jefe del Instituto Nacional de Toxicología y Ciencias Forenses y tres agentes del Departamento de Química del Servicio de Criminalísitica de la Guardia Civil.

A Sheila Barrero la encontraron muerta en el puerto de Cerredo (Degaña) en enero de 2004 en el interior de su coche con un balazo en la cabeza. La mataron de madrugada, cuando volvía a su casa de Degaña desde la localidad de Villablino, en León, donde trabajaba como camarera en un bar de copas todos los fines de semana.

Los investigadores decidieron imputar en su día a su exnovio, un joven leonés que respondía a las iniciales B.V. Sin embargo, el Juzgado de Instrucción de Cangas del Narcea y posteriormente la Audiencia Provincial decidieron archivar el asunto por falta de pruebas en 2008.

El caso se reabrió en 2015 ante la posibilidad de que los nuevos avances técnicos pudieran aportar luz sobre lo ocurrido. Ha sido hace poco cuando se ha levantado el secreto del sumario. Recientemente ha trascendido la existencia de un informe de la Unidad Central Operativa (UCO) que podría aportar novedades a la hora de esclarecer el crimen.