La huella de la Guerra Civil en los fortines del puerto de Tarna

En su recuperación ha prevalecido acercar al público general una parte fundamental de la historia reciente: la Guerra Civil. «Nuestra intención va más allá de la política, simplemente queremos recuperar parte de la historia de nuestro municipio y aprovechar para añadir un nuevo punto de interés turístico», explica el alcalde del municipio, Omar Rodríguez.

Con este fin, el Ayuntamiento de Maraña puso en marcha los preceptivos trabajos de desbroce para dejar los fortines al descubierto, además de elaborar y colocar carteles que señalan la ubicación del complejo defensivo y explican su historia. «Pretendemos que no se pierda una parte tan importante de la historia de la zona, ya que los fortines llevaban noventa años abandonados», indica el regidor. La intención del Ayuntamiento leonés es continuar trabajando en este proyecto para crear una ruta desde el pueblo y así animar a locales y turistas a visitar este enclave histórico.

La puesta en valor de estas construcciones defensivas se enmarca dentro de las I Jornadas Históricas 'Fortines de Tarna', que se celebrarán este fin de semana. Una cita con una parte de la historia que había quedado en el olvido arrancan hoy a las 19.30 horas con una conferencia en las antiguas escuelas de la localidad. Será Guillermo Herrero, secretario de la Asociación para la Recuperación de la Arquitectura Militar Asturiana (ARAMA 36/37) el encargado de impartir la charla, bajo el título de 'Fortificaciones de la Guerra Civil en el puerto de Tarna: hechos históricos y valor patrimonial'. «Es un gran conocedor de ese periodo de la historia y, concretamente, sabe muchos detalles de estos fortines»,indica Rodríguez.

El sábado, las jornadas se trasladan a los propios fotines para conocerlos visualmetne y a través de una recreación histórica con visitas guiadas teatralizadas programadas a las 13, 14, 17 y 18 horas. Además, a los asistentes se les obsequiará con un aperitivo típico de la época.

Se trata de construciones de hormigón armado con un diseño reconocible visualmente muchas carreteras como galerías de fusileros. Las del puerto de Tarna fueron levantadas durante la ofensiva que lanzaron sobre Asturias las brigadas navarras el complejo defensivo resistió 12 días el ataque. El 7 de octubre de 1937 Tarna cayó por fin en poder de la II Brigada Navarra, después de cuatro horas de combate.