Las estaciones de esquí abren con nuevas normas para frenar el coronavirus y poder completar toda la temporada

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Aunque se trata de deportes que se desarrollan al aire libre, que favorecen la distancia y protección entre las personas, los trabajos para adaptarse a estas circunstancias no cesan. «En transporte por cable en las sillas y en los remontes como están al aire libre y el esquiador lleva todo tipo de protección no hay problema. Estaremos pendientes de las colas pero para eso tenemos la megafonía, las pantallas y el control», sostiene Olga Álvarez.

En los lugares cerrados es donde el protocolo de actuación se acentúa, un ejemplo de ellos es la sala de alquiler de material donde cada día pasan centenares de personas por ello han creado una línea de actuación que consiste en la creación de un circuito, «con un semáforo que da paso a la gente, una vez dentro los usuarios pasan por un felpudo de desinfección para continuar de forma ordenada recogiendo todo el material que previamente se ha desinfectado hasta salir por la otra puerta que tenemos, expresa una de las trabajadoras que ultima los detalles de este protocolo.

Una situación que implica cambios y conlleva más trabajo pero eso no resto un ápice de ilusión demostrando que la práctica de este deporte es segura.