La Diputación destina 800.000 euros para adaptar las 200 escuelas rurales de la provincia a la nueva normalidad

Llorente ha explicado que este plan se justifica en el elevado coste económico que para los ayuntamientos supone la implantación de las medidas de prevención en el contexto de la actual crisis sanitaria derivada del COVID-19, definidas por el Protocolo de Prevención y Organización del Regreso a la Actividad Lectiva en los Centros Educativos de Castilla y León aprobado a principios de este mes de septiembre por la Consejería de Sanidad para el curso escolar 2020-2021, que ha arrancado este miércoles. En este contexto, la Diputación de León, consciente de los costes que la adaptación de las aulas supone para las arcas de los municipios, ofrece su colaboración en la adopción de medidas que garanticen unas escuelas seguras para los menores del medio rural y que eviten la propagación del virus en los pueblos de la provincia.

El vicepresidente de la Diputación, Matías Llorente, ha defendido que, en el medio rural, «mientras haya escuelas, hay esperanza de vida y de continuidad» y que estas aulas «ayudan a mantener otros servicios como los consultorios médicos, así como infraestructuras tales como los parques o las piscinas», concluyendo que «por eso es tan importante esta ayuda». Llorente ha destacado que, «ante el abandono de quien tiene las competencias en Educación y en Sanidad, la Junta de Castilla y León, que ha dejado todos o la mayoría de los gastos en manos de los ayuntamientos, la Diputación de León, con gran sensibilidad hacia el mundo rural, quiere colaborar en sacar adelante la adaptación de las escuelas con el deseo de que no haya ningún problema y el curso se desarrolle con la mayor normalidad posible».

El objeto de este plan es la concesión de subvenciones para la adquisición de materiales de desinfección frente al COVID-19 para las escuelas rurales de titularidad municipal en las que se imparta educación Infantil y Primaria en el curso académico recién inaugurado, que en la provincia de León son unas 200. La previsión es que en los próximos días se publiquen las bases reguladoras de esta ayuda que tiene como beneficiarios a los ayuntamientos de menos de 20.000 habitantes, y cuyas cuantías se calcularán en función al número de aulas rurales que atienden en las distintas localidades, con una previsión de gasto de 4.000 euros por cada una de ellas.

Se consideran gastos subvencionables los equipos de desinfección portátiles, sistemas de desinfección para manos y calzado, cartelería y señalización, mamparas para garantizar las distancias de seguridad, mascarillas infantiles, contratación de servicios de limpieza extraordinarios, papeleras de pedal, adaptaciones para grifos y manillas de puertas y cualquier otro suministro que tenga por objeto implementar las medidas establecidas por el citado protocolo del Gobierno autonómico.