Detenido un trabajador de una residencia de Benavides por una presunta agresión

La Guardia Civil ha detenido a un varón como presunto autor de un delito de lesiones en la residencia de ancianos 'Los Ángeles', ubicada en Benavides de Órbigo.

Los hechos, que tuvieron lugar el pasado mes de junio, se suman a la denuncia pública realizada por vecinos y familiares de la localidad. Son varios los trabajadores del centro que destapan una situación «insostenible» dentro de las instalaciones. Los «malos tratos» formaban parte de la rutina que han denunciado en el puesto de la Guardia Civil de Benavides de Órbigo. Tras la investigación, uno de los trabajadores del centro, que llevaba años formando parte de la plantilla, fue detenido por agredir, presuntamente , a una de las ancianas residentes.

Tras finalizar la fase de instrucción, por parte de la Guardia Civil, la ex directora de la residencia también pasó a ser sospechosa de un delito de encubrimiento en el que varios testigos aseguran «tener conocimiento» de lo que estaba sucediendo dentro del centro y «mirar hacia otro lado».

Varios de los trabajadores y extrabajadores del centro así como familiares de los ancianos residentes han sido llamados a declarar en los últimos días en el Juzgado de Instrucción número 1 de Astorga.

«Los ancianos temblaban de miedo al verle entrar», asegura una testigo, que ha preferido mantener su identidad en el anonimato debido a las posibles represalias. Meses de tensión en los que la alcaldesa de Benavides de Órbigo, M. Esperanza Marcos, ha asegurado «desconocer» la situación . «Hemos tenido varias quejas y por ello hemos hecho revisiones», indica.

«Hay varias hojas de reclamaciones pero nosotros tenemos únicamente la potestad de hacer cumplir los ratios de personal», añade. Una situación de «impotencia» en la que, desde la propia institución, se ven «atados de pies y manos». Las quejas de familiares, trabajadores y extrabajadores del centro llegaron a llevarse a pleno pero, al tratarse de una cesión a una empresa privada, la responsabilidad recae sobre la misma.

El trabajador llevaba casi ocho años formando parte de la plantilla de la residencia, según han asegurado a este medio varias fuentes. Su actitud cambió con el paso de los años aunque hay familiares que defienden una actitud «normal y cariñosa» por parte del investigado.

Varios testigos han sido llamados a declarar en el Juzgado de Instrucción de Astorga durante los últimos días, una situación de «tensión» en la que extrabajadores del centro ponen fin a lo que muchos denominan como «una pesadilla».

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