Una importante parte de la población leonesa depende del estado de las carreteras para salvar su economía anual con la temporada de invierno. Dependen directamente de la labor de la Diputación de León, que ya está preparada para combatir la nieve.
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Para esta Campaña de ... Vialidad Invernal la institución estrena una gigantesca quitanieves cuya cabeza tiene capacidad para girar 180 grados. De este modo, cuando finalice un tramo o la carretera termine, puede dar media vuelta y regresar por el mismo recorrido que ha limpiado.
Y es que son más de 3.300 kilómetros de vía repartidos en 746 carreteras los que dependen de la Diputación. «Casi la mitad de estas se encuentran a una altura de más de mil metros de altura» y serán sacudidas por la nieve, para lo que cuentan con medio centenar de vehículos y un equipo humano de cuarenta trabajadores, según ha confirmado el diputado de Infraestructuras, Roberto Aller.
Siete unidades operativas de fresas o quitanieves dinámicas y una unidad de reserva, tres vehículos polivalentes, trece quitanieves de empuje con cuñas y otra en reserva, cuatro 'pick-up', una esparcidora de sal y otra destinada únicamente a extender sal por las vías son parte de la flota que dispone la Diputación.
Además, como medios auxiliares también cuentan con 21 unidades para extender fundentes de hielo y una cabeza tractora con góndola, retroexcavadoras, motoniveladoras, furgonetas, todoterreno o turismos, según ha detallado Aller en la presentación.
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El conjunto de equipo está repartidos en diferentes zonas operativas de la provincia: Montaña de Riaño, Cea/Valderaduey, Alto Porma/Esla Medio, Curueño/Bajo Torío, Luna/Babia Baja, Laciana/Babia Alta, Omaña, La Cepeda, León central, Maragatería, Cabrera y Bierzo.
En lo referido a fundentes, la Diputación tiene tres puntos principales de almacenaje en el Parque Móvil de León, Ponferrada y Astorga, además de las estaciones de esquí de la provincia. De ellos, se tiene previsto abastecer con 360 toneladas de sacos de sal en momentos puntuales a ayuntamientos y mancomunidades para que controlen puntos conflictivos de las carreteras.
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En lo referido a los socavones que se tragaron dos coches en Vega de Valcarce el pasado fin de semana, Roberto Aller ha lamentado el accidente, destacando la rápida intervención por parte de los equipos de trabajo.
«Pensamos que fue un arrastre de troncos o de ramas, porque es difícil que se atranquen tubos con esos diámetros. Se cambiaron y ya están los nuevos, ahora la zona está drenando y esperamos que no vuelva a ocurrir», ha explicado el diputado de Infraestructuras.
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