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Con motivo del V Centenario de la Presa de la Tierra, la comunidad de regantes de la comarca del Órbigo celebra un programa de actividades que pretende honrar su legado y resaltar la importancia del agua en la vida de los pueblos.
La programación ha incluido actividades en centros escolares, como un concurso de relatos y la participación en la imagen y diseño del logotipo por parte de los estudiantes del IES Río Órbigo, de Veguellina de Órbigo.
Además, se están desarrollando exposiciones itinerantes en la comarca y se va a celebrar un acto conmemorativo en el mes de octubre, así como distintas acciones de promoción y difusión en medios y canales digitales.
«Afortunadamente, hemos logrado hacer una exposición con materiales muy interesantes, como mapas históricos, mapas actuales, y con el contenido de la Presa de la Tierra», expresa la catedrática de Historia Medieval de la Universidad de León, Gregoria Cavero. «La exposición es el complemento ideal para que todas las personas que se acerquen a visitarnos puedan ver cómo se encuentra actualmente la Presa de la Tierra», añade.
«Nuestro objetivo es dar a conocer a la sociedad nuestra historia, ligada siempre al agua y las transformaciones agrícolas a través de estos 500 años que han influido de manera palpable en la sociedad en la que nos hemos convertido», destaca Javier Guerra, presidente de la comunidad de regantes.
«La provincia de León es hoy día un referente mundial en el ámbito del regadío, y está a la cabeza del país en el proceso de modernización, en el que también se encuentra la Presa de Tierra. Un proceso clave para lograr un futuro sostenible en unas circunstancias de cambio climático complejas y delicadas», sostiene por su parte el presidente de la Diputación de León, Gerardo Álvarez Courel.
«El regadío es una de las armas más eficaces contra la gran lacra de la despoblación a la que nos enfrentamos cada día. Y de nuevo, la comarca del Órbigo sigue dando a este respecto otra lección ya que, no en vano, estamos hablando de la zona que sigue concentrando el mayor número de poblaciones por kilómetro cuadrado de la comunidad», concluye.
La programación del V Centenario de la Presa de la Tierra arrancó en el mes de mayo un ciclo de conferencias impartidas por investigadores e historiadores de distintas universidades coordinadas por la catedrática Gregoria Cavero.
El 30 de agosto se celebrará la siguiente conferencia, 'Los cultivos de ayer y de hoy', que estará a cargo de Sara Mayo, de la Universidad de León, en el Auditorio municipal Reina Berenguela de Villares de Órbigo.
Carlos Junquera Rubio ofrecerá la última conferencia, 'Los cauces y los usos complementarios: los molinos', en la Sala Fundos de Veguellina de Órbigo el 25 de octubre.
Además del ciclo de conferencias, durante los meses de julio y agosto se está desarrollando una exposición itinerante, coordinada también por Gregoria Cavero. Permaneció del 5 al 21 de julio en Veguellina de Órbigo, y actualmente está expuesta en Benavides de Órbigo, municipio donde permanecerá hasta el 9 de agosto.
El propósito es reconocer la influencia trascendental de la Presa de la Tierra en el desarrollo económico, social y paisajístico de la región a lo largo de cinco siglos, así como promover la conciencia sobre la importancia del agua como recurso vital y motor de progreso para nuestras comunidades.
Además, pretende inculcar valores de sostenibilidad, conservación del entorno y patrimonio cultural en las generaciones presentes y futuras.
Hace 500 años sucedió un hito histórico que marcó la prosperidad y el desarrollo de varios municipios de la provincia de León: la constitución de la Presa de la Tierra.
La Presa de la Tierra es una comunidad de regantes constituida entorno a un cauce histórico de riego del siglo XV. Las primeras referencias que conocemos de la Presa de la Tierra son de 1524, cuando merced a una Pragmática Real se ordenó la creación de la Aparcionería. Presa que, partiendo del río Órbigo en Santa Marina del Rey, debía pasar por el pueblo de Benavides y distribuir en él las aguas, para dicha villa y para los pueblos situados aguas abajo.
Al principio los pueblos que la formaron fueron Benavides, Gualtares, Moral, Villares, San Feliz y Villarejo, años más tarde se unieron Hospital de Órbigo y, posteriormente, Estébanez de la Calzada.
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