El conductor del atropello mortal quintuplicaba la tasa de alcohol, con 1,16 miligramos, y circulaba sin seguro

Se trata de un varón natural de Cataluña pero que residía en Valladolid, donde trabajaba como empleado de la plata de Renault.

Su estado de embriaguez, según han señalado a este diario, era tal que incluso el conductor creyó estar dirigiéndose a Valladolid. Su intención, según declaró, era incorporarse en su puesto de trabajo.

Sin embargo, el varón conducía dirección León. Y fue allí, donde se mascó la tragedia. A las 10:54 horas arrollaba a los tres ciclistas en la N-601, a la altura de Matallana de Valmadrigal, para, posteriormente, darse a la fuga.

En torno a unos 20 kilómetros, el conductor era interceptado por dos patrullas de la Guardia Civil. Allí se comprobó además de su estado de embriague que el varón circulaba sin seguro de coche.

La detención se produjo gracias a la colaboración de dos camioneros que, tras presenciar a un vehículo con un impacto en el lateral derecho delantero, alertaron a la Guardia Civil, aportándole el color y el modelo del vehículo.

Datos que permitieron su detención, entre la localidad de Mansilla de las Mulas y Villamoros, a un kilómetro escaso de los restos del yacimiento de Lancia.