El frío y la lluvia no han impedido que la Feria Ganadera de Riaño vuelva a ser un éxito. La localidad de la Montaña Oriental Leonesa esperaba con ansia la llegada de un fin de semana festivo que, tradicionalmente, ha dado la bienvenida al mes de noviembre. Una ocasión única para los ganaderos de la zona de dar a conocer sus piezas de vacuno ante los cientos de visitantes que se dieron cita en Riaño el pasado fin de semana.
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La jornada comenzó el día 4 a las 8:00 con la entrada del ganado en el recinto ferial. La lluvia hizo acto de presencia en las primeras horas del evento, pero la llegada del sol animó el ambiente de una feria que lleva más de tres lustros siendo parte del calendario riañés. Cerca de 200 animales se dieron cita en el recinto ferial para participar en el concurso. Las reses y los mastines fueron el centro de atención de las casetas donde se colocaron los participantes.
En esta ocasión, la feria contó con una importante novedad de carácter reivindicativo. Los ganaderos de la zona aprovecharon el altavoz de la feria para mostrar su descontento ante la amenaza del lobo. Colocado en el campo de fútbol, un cártel mostraba la cuantía de daños que ha ocasionado el animal en la montaña de Riaño. Cientos de cabezas de bovino, ovino, caprino y equino han sido víctimas de un animal cuya caza está prohibida en territorio nacional. Según explicaba el alcalde, Senén Presa, la Junta lleva más de tres años sin cubrir los daños ocasionados por el lobo, lo que ha llevado a los ganaderos a exigir medidas.
Con el paso de las horas, la expectación en torno al evento aumentó y las calles de la localidad se llenaron de visitantes dispuestos a adquirir productos artesanales del mercado. Cerca de 200 puestos dieron colorido a Riaño, aunque sí se apreció un descenso con respecto a ediciones anteriores por motivo de la climatología adversa.
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Desde el ayuntamiento, se hizo un esfuerzo económico para que todos los participantes pudieran costearse el desplazamiento. Senén explicaba cómo los ganaderos recibieron 50 euros, independientemente de la posición que obtuvieron en la calificación.
En cuanto a la representación institucional, la feria contó con la presencia de varios cargos políticos de la provincia. Luis Mariano Santos, alcalde de Cistierna y procurador de las Cortes por Castilla y León, y Roberto Aller, vicepresidente primero de la Diputación de León, fueron algunos de los rostros más conocidos que se dieron cita en Riaño. Junto a ellos, alcaldes de otros municipios cercanos acompañaron al regidor local Senén Presa en un evento clave dentro del calendario festivo de la Montaña Leonesa.
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