El primer día de trabajo de los 37 bomberos forestales voluntarios de la base de la Brif Tabuyo llegó este lunes al municipio de Calles. Con una población de 431 habitantes, la localidad es una de las menos afectadas por la DANA que arrasó decenas de pueblos el pasado martes 29 de octubre.
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La altitud del pueblo y la lejanía a las zonas más afectadas les salvó de un desastre similar al ocurrido en localidades vecinas como las cercanas al punto cero o epicentro del desastre.
Las secuelas de la DANA siguen muy presentes seis días después de su paso por Valencia y son varios los voluntarios que han pedido acudir al lugar para ayudar en la medida de lo posible.
Desde la provincia de León son varios los cuerpos que se han sumado a la solidaridad para ayudar a los vecinos de la Comunidad Valenciana. Un total de 37 bomberos forestales llegaron durante el fin de semana preparados para actuar en el lugar, pero no ha sido hasta este lunes 4 de noviembre cuando les han encomendado sus primeras labores.
Enviados a la localidad de Calles, un pequeño pueblo perteneciente a la comarca de Los Serranos, los voluntarios han desarrollado labores de limpieza en la zona del polideportivo, la piscina municipal y en la vegetación de las zonas superiores del pueblo.
Con temor a un «tapón» que se encontraba por encima del pueblo y que bloqueaba el paso del agua con ramas y árboles, los bomberos trabajaron con maquinaria del lugar y motosierras para desbloquear el atasco y evitar inundaciones que se pudiesen provocar a raíz de otro alubión.
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A pesar de no ser uno de los puntos más afectados por la DANA los vecinos han agradecido desde el primer momento la participación de estos voluntarios que durante los próximos días tendrán nuevas misiones dentro de la comunidad.
Según han declarado a este medio otros miembros del cuerpo están dispuestos a colaborar en los pueblos más afectados donde se necesite su aportación. Son más de 300 los bomberos forestales de las 9 bases repartidas por todo el país que actualmente están trabajando en la zona. La única base no convocada ha sido la de la Palma.
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Un equipo que lucha en conjunto y que pretende aportar y participar en todo lo que le permita la administración.
«Nunca sobran manos», asegura Pablo Gonzalez, uno de los bomberos forestales de la base de la Brif Tabuyo. Desde su llegada solo se le ha pasado por la cabeza el mismo pensamiento de querer ayudar en todo. «Haremos lo que sea necesario», asegura el leonés.
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