Los alcaldes socialistas del Órbigo trasladan al gerente del Sacyl la «penosa situación de nuestra sanidad pública»

Los munícipes trasladaron a los responsables de la Junta la queja por la «penosa situación sanitaria» vivida en la Zona de Salud del Órbigo este verano, con consultorios cerrados, prácticamente, todo el mes de agosto y otros de cabecera municipal, como es el caso de Santa Marina del Rey, que tenían una hora, dos días a la semana, en horario de ocho a nueve de la mañana, que, en palabras de su alcalde, Francisco Álvarez, «es como no tener consulta y menos a esas horas».

La portavoz del PSOE de Llamas de la Ribera, María Indira Prieto Fernández, manifestó su indignación porque en su municipio «sólo te podías poner enferma un día a la semana, que es cuando pasaba el médico unas horas».

Los alcaldes y concejales le hicieron ver al gerente que, en los últimos años, «vamos de mal a peor en la atención sanitaria, sin cubrirse las vacaciones, ni sustituciones por bajas y descansos a lo largo de todo el año, lo que provoca consultas colapsadas, cuando un médico tiene que atender a más de un ayuntamiento».

Después de varias reuniones, iniciadas el 20 de junio, «no se avanzó nada, empeorando la situación», por lo que solicitaron que se tomen medidas para los periodos vacacionales siguientes, como es Navidad, cuando volverán a tener más días libres los profesionales médicos, «que están trabajando por encima de sus posibilidades» y a los que los representantes políticos agradecieron «su enorme esfuerzo».

La Junta también recibió la demanda «urgentísima» de una ambulancia las 24 horas en el centro de salud de Benavides, cabeza de la Zona Básica de Salud del Órbigo, tras constatar varias urgencias con esperas superiores a la hora y media.

La reunión transcurrió de forma cordial y receptiva a las peticiones, pero no por ello los representantes socialistas del Órbigo salieron de ella convencidos de que se van a resolver los problemas por lo que trasmitieron al gerente que estarán vigilantes en todo lo que afecta a la salud de sus vecinos y que tomarán todo tipo de medidas si no se observa que las buenas palabras se convierten en hechos.