Las ventas del comercio minorista caen un 4,4% en el último año en Castilla y León, casi dos décimas menos que la media nacional

Las ventas del comercio minorista bajaron el pasado año en todas las comunidades autónomas. País Vasco (-7,5 por ciento); Castilla y León (-5,7 por ciento) y Comunidad Valenciana (-5,2) presentan los mayores descensos. Por su parte, Canas (-0,4 por ciento), Andalucía y Comunidad de Madrid (ambos con -1,8 por ciento) registran los menores descensos.

Por lo que respecta al índice de ocupación en el sector, en Castilla y León se registró un aumento del 3,2 por ciento, frente al 2,4 por ciento respecto al mismo mes de 2020. El empleo del comercio minorista aumentó en 17 comunidades autónomas en tasa anual. Las Islas Baleares registró el mayor incremento (3,7 por ciento).

En cuanto a los modos de distribución, fueron las grandes cadenas la que presentan un mayor aumento en estos meses (130,4 por ciento); seguida de las grandes superficies ( 115,1 por ciento); las pequeñas cadenas (105,6) y las empresa unilocalizadas (104,9). En lo que se refiere a la venta en general fueron las relacionadas con el equipo del hogar 126,1 las que más crecieron, seguidas de las estaciones de servicios un 120,6 por ciento, una subida marcada por el fin de las restricciones a la movilidad.

La alimentación subió un 115,6; los equipos personal, un 105,2 por ciento y otros bienes, 110,9 por ciento.

El avance favorable de la pandemia también tuvo un efecto importante en la evolución de las ventas según los diferentes modos de distribución. Todos ellos sufrieron un importante aumento de ventas durante los meses de cierre de los establecimientos comerciales no esenciales, siendo las grandes cadenas el canal que más aumentó (159,3 por ciento).

Le sigue de cerca las grandes superficies 155,9 por ciento, mientras que las pequeñas cadenas aumentaron un 126,7 por ciento. Las empresas unilocalizadas aumentaron un 117, 7 por ciento.