Veganzones mantiene sus palabras sobre los sindicatos: «Hemos venido a limpiar la ciénaga»

En la sesión de control al ejecutivo del pleno de las Cortes, la socialista le preguntó: «¿Sigue manteniendo el consejero de Industria, Comercio y Empleo sus afirmaciones respecto de los sindicatos de clase?», después de que Comisiones Obreras en Castilla y León se haya querellado por vía penal contra el consejero por injurias y calumnias por sus críticas.

«Sí», respondió Mariano Veganzones, quien aseguró que están gestionando políticas «eficaces» e invirtiendo los 20 millones que recibían los sindicatos en formación y prevención de riesgos, lanzando la «mayor oferta de la historia», al tiempo que han impulsado una estructura «más moderna» en el Ecyl y han contratado a 150 personas para áreas técnicas, lo que ha hecho que el pasado mes la Comunidad fuera una de las autonomías donde más bajó el paro y donde la industria y el comercio más impulsan la economía, dijo.

Patricia Gómez le afeó que haya dedicado «lindezas» como «come gambas» a los sindicatos, a los que pide -dijo- que devuelvan lo robado. A su juicio, el consejero se olvida de que tienen la representatividad del 71 por ciento de los trabajadores y destacó que han tenido un «lugar muy importante» en la conquista de derechos y libertades, lo que le permiten a él ocupar su cargo.

Además, la socialista le recriminó que dude de la «honestidad» y representatividad de los sindicatos de clase, a los que le recordó los critica por ocupar un «chiringuito» como el Consejo Económico y Social (CES), creado en 1991 y donde le recordó él ha estado «pululando» en diferentes puestos. También aseguró que le dieron una «lección» al rechazar una subvención sin convocatoria de 495.000 euros.

«¿A estas subvenciones que han solicitado los propios sindicatos se refiere?», le dijo a la socialista para añadir: «UGT y PSOE la misma cosa es». Además, aseguró que los sindicatos tienen una reputación «pésima» en el estudio de noviembre del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS), ya que el 70 por ciento de los españoles tiene «poca o ninguna» confianza en ellos y les dan un «suspenso con un muy deficiente».

También señaló que, según la OCDE, el porcentaje de afiliados a un sindicato es el 12 por ciento, el más bajo de la serie histórica y uno de los más bajos de los países desarrollados. Esto, dijo, se debe a que las organizaciones se preocupan de sus «propios intereses» y buscan subvenciones que reciben de forma privilegiada para financiar sus estructuras y que utilizan para gestionar «carísimas» políticas, por lo que sentenció son un «agujero negro».

Finalmente, la viceportavoz socialista le recordó la participación de los sindicatos de clase en los principales acuerdos de la Comunidad y criticó que los desprecien. «A diferencia de usted y de lo que representa, los sindicatos de clase no están en venta, pida perdón y márchese para casa», concluyó.