Suárez-Quiñones comparece este lunes a petición propia para dar cuenta del incendio de Ávila

Suárez-Quiñones comparecerá a petición propia en la Comisión de Fomento y Medio Ambiente de las Cortes algo más de un mes después de este siniestro forestal que se declaró en la mañana del 14 de agosto por el incendio de un coche en la cuneta de la carretera N-502 (Ávila-Córdoba) que une los términos abulenses de Navalacruz y Cepeda de la Mora. Las llamas pasaron a la ladera contigua y el calor, junto al pasto seco, derivaron en que se extendiera a gran velocidad.

El avance del fuego a lo largo del fin de semana, con especial gravedad durante el domingo 15 de agosto, provocó la evacuación de unas 1.000 personas residentes en las localidades abulenses de Riofrío, Sotalbo, Villaviciosa, Palacios y Robledillo.

Según los datos que aportó el propio consejero el 1 de septiembre, cuando expuso el balance de la superficie arrasada por las llamas, de las 22.037 hectáreas de terreno afectadas, 2.738 han sido de masa forestal arbolada, tanto en bosque abierto como cerrado (12,4 por ciento); 5.788 hectáreas (26,3 por ciento) de matorral y monte con arbolado disperso; 12.785 (58 por ciento) de pastizal; 893 hectáreas (4,1 por ciento) de superficie de tipo agrícola, y 5,52 hectáreas de otros tipos de superficies.

Suárez-Quiñones explicó entonces también que el 85 por ciento de las masas arboladas afectadas han sido de pino silvestre, en masas adultas o repoblaciones de diferentes edades de madurez, mientras que el resto de especies afectadas, en mucho menor porcentaje, han sido encinas, pino resinero, rebollo, chopo y fresno.

En cuanto a Montes de Utilidad Pública (MUP) se han visto afectados cinco, además de un consorcio, siendo la afección más relevante la del MUP 47 'Sierra de Ávila', perteneciente a la Mancomunidad Municipal Asocio de Ávila, que se ha quemado en su totalidad, unas 6.700 hectáreas de las cuales 2.250 hectáreas eran repoblaciones arboladas de pino silvestre (pinus sylvestris) de diez a 60 años.

Se da la circunstancia de que el pasado 9 de septiembre el procurador de Por Ávila, Pedro José Pascual Muñoz, registró el escrito para solicitar la creación de una comisión de investigación que analice «desde la transparencia y la objetividad« la gestión del incendio de Navalacruz y en el que ardió la Sierra de la Paramera.

Según informó entonces la formación abulense, Muñoz ha recabado el apoyo necesario de los 35 procuradores del Partido Socialista, de parte de sus compañeros en el Grupo Mixto --Luis Mariano Santos, de UPL, y Pablo Fernández y Laura Domínguez, de Podemos-- y de la procuradora no adscrita, María Montero.

En el escrito registrado por Pedro Pascual se solicita que las Cortes analicen a través de una comisión de investigación la gestión de este incendio forestal, el mayor registrado en la Comunidad, y «arrojen luz sobre todo lo acontecido y se tomen medidas para que no vuelva a suceder».

«Tenemos que saber qué sucedió el pasado 14 de agosto, porque estamos ante una catástrofe medioambiental y social sin precedentes con graves consecuencias, tanto para la biodiversidad de la zona, como para las numerosas explotaciones agroganaderas«, argumentaba el procurador abulense que ve »imprescindible« que se analice la gestión de este fuego.

Por su parte, el viernes 10 de septiembre, el presidente de la Junta, el 'popular' Alfonso Fernández Mañueco, se desplazó hasta Navarredondilla para presentar el Plan de Restauración de la zona devastada por el incendio de la Sierra de la Paramera, que contempla una inversión de 25 millones de euros de la Administración autonómica, Diputación y Gobierno durante una década.

El objetivo es «restaurar plenamente la zona y mejorar la situación de todas las personas que viven en ella», aseguró ante los alcaldes de los 14 municipios afectados, como son Burgohondo, El Barraco, La Hija de Dios, Mengamuñoz, Mironcillo, Narros del Puerto, Navalacruz, Navalmoral, Navarredondilla, Riofrío, San Juan de la Nava, San Juan del Molinillo, Solosancho y Sotalbo.

«Las actuaciones, que ya se han comenzado a aplicar con la agilidad e inmediatez que requiere una situación de emergencia como esta, incluyen el compromiso de la Junta de suministrar alimento y agua a la ganadería mientras sea necesario, actuaciones en infraestructuras, protección hidrológica y recuperación forestal, reposición de cercados y reparación de caminos rurales«, explicó entonces.

Entre otras medidas, mencionó la construcción de un cordón de defensa, de casi 4 kilómetros, para la contención de sedimentos, junto a la limpieza de cauces y azudes y la reparación de elementos de la red de abastecimiento, y medidas de repoblación forestal y regeneración de hábitats, además de actuaciones de apoyo al patrimonio cultural, incluyendo un nuevo centro de acogida e investigación.