Sequeros: el pueblo de la moza santa, la profetisa Juana

La historia de Sequeros está ligada, en cierto modo, a la leyenda de la moza santa, como se conocía a Juana Hernández, que tenía una gran devoción a la Cruz y quien en 1424 tras fallecer revivió unos instantes para hacer varias profecías, entre ellas el descubrimiento de la talla de la Virgen de la Peña de Francia años después.

También anunció la fundación de tres conventos, como fueron el de Santa María de Gracia, en San Martín del Castañar, el propio de la Peña de Francia y el de las Batuecas. La tercera profecía fue la ruina económica de sus padres. Pero, además, según cuentan los mayores de Sequeros, también predijo que en el casco urbano no caerían «ni rayos ni centellas», como así ha sido y que cada año se iría cayendo un poco de la casa donde vivió.

Los restos de esta joven, tras deambular su cráneo por diferentes lugares, se pueden visitar, junto a los de Rimón Roland –conocido como Simón Vela– y quien descubriera la imagen de la Peña de Francia, en la iglesia de Nuestra Señora del Robledo de Sequeros.

Y es precisamente en esa iglesia donde se celebra una de las fiestas más arraigadas del municipio, la de la Santa Cruz el 3 de mayo, en la que la procesión pasa por delante de la casa de la moza santa y en cuya puerta, junto a la cruz de granito, se hace una parada.

Y si de fiestas y tradiciones hablamos, no podemos olvidar los petitorios del día de Navidad chica (26 de diciembre) y Reyes (6 de enero), ya que Sequeros es uno de los pocos pueblos que ha sabido mantener esta tradición generación tras generación, protagonizada por los hombres casados, en diciembre, y por los jóvenes a lomos de caballerías, en enero; en los que se recaudan monedas para el mantenimiento de los templos.

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