Los reyes se interesan por el reto demográfico y el impacto de la COVID-19 en la provincia de Soria

En esta localidad fueron recibidos por la ministra de Industria, Comercio y Turismo, Reyes Maroto; el presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco; el presidente de las Cortes, Luis Fuentes; el delegado del Gobierno, Javier Izquierdo; el alcalde de la localidad, Juan Ramón Soria, así como por otros representantes de la sociedad soriana.

Los reyes recibieron el calor de los vecinos de la zona, que no dudaron en dedicarles unos vivas, en esta localidad, uno de los 22 pueblos más bonitos del país, que ya conocía de niño Felipe VI y que no es la primera que vez que recibe una visita real, pues en 1984 su padre, Juan Carlos I, también estuvo en este municipio. Además, fueron agasajados con frutos rojos del bosque de una nueva empresa de economía social ubicada en El Royo.

El monarca y su mujer pudieron intercambiar impresiones con seis vecinos que les esperaban en la plaza del Rollo y que fueron elegidos mediante un sorteo para mantener un encuentro breve, en el que les explicaron la situación en la que se encuentra Soria.

Así, aprovecharon la presencia de los monarcas para demandar que se promueva la implantación de empresas porque, a su juicio, «la provincia agoniza». Emilia Escribano, cuya familia tiene tres hoteles rurales en la localidad, también solicitó ayuda para el sector del turismo de interior porque «todavía no se ha revitalizado, tras la crisis sanitaria del coronavirus».

El monarca les preguntó cómo habían vívido la pandemia del COVID-19 en el pueblo y si el virus había afectado mucho a Soria, a lo que los vecinos le respondieron que sí. Felipe VI analizó las consecuencias del reto demográfico y abordó las posibles estrategias para hacerle frente.

Así, se refirió a la posibilidad de hacer atractivos estos territorios con iniciativas que favorezcan la movilidad de ida y vuelta entre zonas menos pobladas y las de que cuentan con más habitantes. También la reina Letizia se interesó por la administración de los servicios públicos a nivel local.

Además, los vecinos recordaron al rey que ya conocía la zona, a lo cual él asintió y les explicó que en 1977, cuando tenía nueve años, acudió a la Laguna Negra e incluso navegó por el pantano de la Cuerda del Pozo y participó en un campamento juvenil, denominado Las Cabañas.

Por su parte, el presidente de la Junta destacó la importancia digitalización para afrontar el reto demográfico y remarcó que Castilla y León apuesta por un autonomismo útil y leal. Además, Alfonso Fernández Mañueco les trasladó la importancia que tiene la educación para la Comunidad, por lo que señaló es líder en las ratios de calidad del sistema.

El alcalde de la localidad señaló que la visita real supone una gran publicidad para Vinuesa y permite volver a poner el pueblo en el mapa para el turismo de interior. «Es un honor que venga; una responsabilidad. Me lo confirmaron el lunes y hemos tenido muchos nervios», dijo Juan Ramón Soria.

Tras el encuentro, que se celebró en las antiguas escuelas, iniciaron un recorrido por las calles de Vinuesa, hasta terminar su paseo en la plaza principal de esta localidad soriana, cuyos balcones lucían banderas de España y Castilla y León. De hecho, la fachada de la casa de los Ramos, una de las más representativas de la arquitectura de la zona, tenía una de varios decenas de metros.

Finalmente, los reyes abandonaron al mediodía la localidad para desplazarse hasta la ciudad de Soria, donde tienen previsto visitar el Instituto Machado, en el que el poeta sevillano impartió clases de francés.