La Junta pide al PSOE que apoye un real decreto que impida el cierre de las térmicas

La consejera de Economía y Hacienda, Pilar del Olmo, ha exigido al PSOE de Castilla y León, especialmente a su líder, Luis Tudanca, que convenza a sus compañeros en las Cortes Generales (Congreso y Senado) que han apoyado con éxito una moción de Podemos para que las centrales térmicas dejen de funcionar en 2020.

«Para que perviva la minería del carbón debe haber un sitio donde se queme», ha subrayado Del Olmo esta tarde en el pleno de las Cortes de Castilla y León, en respuesta a la demanda de la socialista Consolación Pablos para que el Gobierno regional haga «todo lo posible» por defender el mantenimiento de las centrales.

La consejera le ha recordado que la decisión del cierre de las térmicas con más de 50 megavatios de producción corresponde al Gobierno central, y que solo un real decreto puede detener la petición de Iberdrola, sociedad propietaria de las térmicas de Lada y de Velilla del Río Carrión, para clausurar su actividad.

«Ustedes aquí dicen una cosa y en Madrid otra», ha afeado Del Olmo a Pablos, a quien también ha informado de la petición por parte de la Junta de una reunión con el ministro de Energía, Álvaro Nadal, para explicarle la situación y en la que «vamos de la mano con el Principado de Asturias», de gobierno socialista.

La consejera ha pedido al PSOE que apoye al Gobierno «aquí y allá», como ha hecho en Asturias.

El cierre de la térmica de Velilla del Río Carrión «puede ser la puntilla» para esa comarca del norte de Palencia donde el Gobierno regional, por razones «oportunidad política», acaba de adjudicar una Uvi móvil reclamada desde hace muchos años, ha lamentado por su parte la parlamentaria socialista.

«Hagan todo lo posible para que no se cierre porque, como dicen los vecinos, sin las minas se puede vivir, pero sin la térmica no», ha resumido.

Más de 3.000 personas se manifestaron el pasado domingo en la Plaza Mayor de Velilla del Río Carrión contra el cierre planteado de la central térmica que dinamiza el territorio.

Toda esta situación, a juicio de Consolación Pablos, tiene su origen en la «mala gestión de las cuencas mineras» por parte de la Junta de Castilla y León.