Fomento baraja dos posibles trazados para la línea de AVE entre Burgos y Vitoria

De la Serna explicó las conclusiones del nuevo estudio informativo para este tramo y precisó que los técnicos del Ministerio descartaron la opción de acometer la infraestructura aprovechando el corredor ferroviario actual ya que supondría una incidencia directa sobre la prestación del servicio y condicionaría todo el proyecto. “Ha sido un proceso administrativo muy complejo”, reconoció.

Por ello, barajan estas dos opciones para unir Burgos y Vitoria a tavés del AVE, cuya principal diferencia, dijo, se centran sobre todo en el tramo Burgos-Pancorbo. La primera alternativa, valorada en 1.374 millones de euros, saldría de Burgos hacia el Norte, continuando por Monasterio de Rodilla hasta Briviesca, siguiendo un trazado parecido al de la autopista AP-1. Serían 50 kilómetros, divididos en un 18,5 por ciento de viaductos y un 4,5 por ciento túneles.

Mientras que la segunda alternativa, valorada en 1.241 millones de euros, propone desviarse hacia el Noroeste rodeando Briviesca. El trazado sería de 52 kilómetros pero no sería necesario la construcción de tantos viaductos como en la anterior opción ya que solo se contemplaría un 5,5 por ciento.

Una vez se llega a Pancorbo, De la Serna habló de “una única opción viable” para atravesar el desfiladero, que es con la ejecución de tres túneles -uno de ellos por debajo de los Montes Obarenes- y de dos viaductos. “La solución planteada es la idónea a pesar de ser muy cara”, dijo, y añadió que “se garantiza la preservación de los valores ambientales”. En cuanto al tramo que afecta al paso del AVE por Miranda de Ebro, señaló que la opción elegida es el corredor Miranda con baipás, que rodee la ciudad por el Norte, discurriendo de forma paralela a la autopsita AP-1.

A modo de resúmen, el ministro aseguró que las alternativas propuestas permitirán incrementar la velocidad máxima de circulación hasta los 350 kilómetros por hora frente a los 270 kilómetros por hora planteados en su inicio y agregó que ello permitirá disminuir los tiempos de viaje desde Burgos hasta Vitoria a los 29 ó 30 minutos.

En este contexto, De la Serna aseguró que la voluntad del Gobierno es “acelerar los trámites adminitrativos” para marcar como horizonte el escenario de 2023 para el cojunto de la denominada ‘Y vasca’, y poder “entrar en funcionamietno en el mismo momento”. Para ello, se intentará, dijo, someter a información pública y trasladarlo al Ministerio de Medio Ambiente para tramitar la Declaración de Impacto Ambental (DIA) antes de que finalice 2017. Así, será en 2018 cuando se pueda decidir cuál de los dos posibles trazados se elegirá para ejecutar la línea de alta velocidad Burgos-Vitoria.

Finalmente, el ministro de Fomento, Íñigo de la Serna, también recordó que las obras del tramo de alta velocidad entre Venta de Baños y Burgos estarán finalizadas antes del verano de 2018 y que, a partir de esta fecha, comenzará la circulación en pruebas “hasta que empiecen los primeros servicios comerciales”.