ICAL
Valladolid
Miércoles, 5 de octubre 2022, 10:51
El consejero de Economía y Hacienda, Carlos Fernández Carriedo, destacó este miércoles el «claro apoyo» de su departamento al sector productivo y empresas en materia de ahorro y eficiencia energética, con líneas de ayuda en marcha en estos momentos que superan los 110 millones de ... euros, y que también contemplan instalación de combustibles térmicos vinculados a la biomasa en empresas, así como el cambio de procesos productivos y adquisición de flota de vehículos eléctricos.
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«Somos muy conscientes del impacto que la crisis energética está teniendo en las empresas y encontrarán en la Junta una administración amiga para mantener su actividad y no introducir más problemas de los que tienen», dijo.
Así lo aseguró durante el desayuno informativo 'Eficiencia energética empresarial: soluciones para una nueva realidad', organizado por El Norte de Castilla y BBVA, en el que Carriedo intervino con anterioridad al responsable de Análisis Económico de BBVA Research, Rafael Domenech.
El consejero portavoz aprovechó para reclamar al Gobierno central que las decisiones que se establezcan en términos de ahorro a las empresas sean «voluntarias, no obligatorias», porque «no se trata de poner el dedo diciendo que el culpable del consumo energético es el sector del comercio o el turismo».
«Poner de manifiesto que se apoye a las empresas, como hace la Junta, es lo positivo, criticarlas, como hace el Gobierno, es negativo. Creo que no son culpables de esta situación, sino las víctimas, y así las tenemos que ver, porque crean empleo y riqueza. Por eso nuestras políticas van en esa dirección, al contrario que el Ejecutivo central», reprochó.
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Por su parte, Rafael Domenech sostuvo que España se ha empobrecido un cuatro por ciento respecto al resto del mundo este año y profundizó en la importancia de la ejecución de los fondos Next Generation.
También se refirió a las dificultades que han provocado la guerra en Ucrania, que «ha sorprendido en un momento malo» pero del que, dijo, se puede analizar por dos vías. Una positiva, que este conflicto «reafirma la necesidad de realizar la transición energética». «Si la hubiéramos empezado hace una década, esta guerra nos hubiera cogido con menos dependencia del gas ruso». Y se refirió también a la parte negativa, traducida en que «para poder amortiguar el golpe es necesario incrementar las emisiones de CO2». «Esperemos que sea transitorio», reflexionó.
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