Bomberos forestales denuncian las condiciones laborales de las brigadas en Castilla y León, «las más precarias de Europa»

«Dijeron que había medios suficientes pero si no es por los estatales y por los procedentes de otras comunidades no habría habido personal suficiente, que aun así, no lo hubo», matiza el vicepresidente y brigadista forestal en la base leonesa de Tabuyo del Monte; quien este fin de semana trabajo en la extinción del incendio.

«Gracias a la labor de los medios de extinción, pero también de la gente de los pueblos, lograron salvar sus casas pero quedaron totalmente rodeados por el fuego, acabando con todos los recursos de los que dependían para subsistir», advierte señalando que se deben pedir responsabilidades porque con ayudas económicas no se va a reponer todo el daño«.

Desde la Atbrif denuncian la situación precaria de los medios de extinción en Castilla y León. «Las condiciones laborales y de trabajo son las peores de toda Europa, con turnos de 18 horas. Pero un trabajador no puede denunciarlo porque entonces no le contratan al siguiente año», puntualiza. «La Junta de Castilla y León ha sido cómplice absoluto de esta catástrofe ya que conocían las condiciones climatológicas», destaca.

Asegura el brigadista que también el gobierno central debe asumir su responsabilidad ya que, a pesar de formar parte del acuerdo de gobierno entre PSOE y Podemos, no llega el Estatuto Básico de Bomberos Forestales. «Ayudaría a operativos como el de Castilla y León a acabar con la precariedad en la que se encuentran», puntualiza.

La situación vivida en la Sierra de la Culebra ha llevado a los bomberos forestales a convocar una concentración mañana, a las 11.00 horas, frente a las Cortes de Castilla y León. «La gestión del incendio ha sido un descontrol pero suele ocurrir en estos incendios tan grandes», admite señalando que la movilización en el primer día fue insuficiente, más en las horas nocturnas, «y el primer día es cuando se debe atajar» concluye señalando que aunque se ha cifrado en 30.000 hectáreas quemadas las fotos de satélite apuntan a 35.000.