La Junta logra salvarse del ciberataque y garantiza sus 74.000 puestos informáticos

Suaréz-Quiñones, que realizó estas declaraciones en Valladolid antes de inaugurar el tercer encuentro 'Castilla y León 4.0. Transformación, digitalización e innovación', jornada organizada por El Corte Inglés y donde se dieron cita decenas de expertos para analizar los últimos avances informáticos, también resaltó que el ciberataque sólo afecto de forma aislada a siete ordenadores de la red de la Junta.

El consejero también argumentó que en España el cibertaque ha tenido unos efectos muy inferiores a los registrados en otros países y recalcó que tanto España, como de forma particular Castilla y León, están bien preparadas para hacer frente a este tipo de ataques informáticos, aunque advirtió que este tipo de situaciones deben servir para no bajar la guardia en ciberseguridad.

Gabinete de crisis

En este sentido, Suárez-Quiñonez, explicó que para hacer frente al ataque la Junta puso en marcha un gabinete de crisis para garantizar la seguridad a los 74.000 equipos de la administración regional, a la vez que Red Corporativa ofreció una respuesta eficaz con sus mecanismos de seguridad, lo que impidió que el virus penetrara en la red de la Junta gracias a las medidas preventivas.

Además, según destacó, el virus tampoco ha tenido una incidencia relevante en el funcionamiento de las empresas, ni en Sacyl, donde el sistema informático es independiente del resto de la Junta. «En su caso los profesionales informáticos también han realizado un buen trabajo, pero también hay que destacar que todas las redes contaban con sistemas de seguridad preventivos para evitar este tipo de ataques», aseveró.

Al mismo tiempo, reconoció que este ciberataque sirve para prevenir futuros ataques al actualizar todos los software y poner en marcha otras actuaciones de seguridad. «Este tipo de ataques nos debe servir para aprender y mejorar nuestros mecanismos de defensa», sentenció

Por último, el consejero recalcó que las tecnologías son un elemento fundamental del progreso en todas su facetas hasta el punto que sin ellas «no podríamos vivir», pero advirtió que también se han convertido en una herramienta al servicio del mal que obliga a todos a estar preparados para combatir a los delincuentes virtuales.