El tipo fijo revoluciona el mercado hipotecario y se acerca a máximos de la última década

El crecimiento que han experimentado se produce en unos meses en los que el Euríbor, el indicador para nueve de cada diez hipotecas en Castilla y León, ha entrado en terreno negativo, arrastrado por las políticas del Banco Central Europeo (BCE), según explicó a Ical la gerente de la Asociación Hipotecaria Española (AHE), Lorena Mullor, quien recalcó que en conjunto, los préstamos con un tipo fijo en algún momento superan el 40 por ciento, algo no visto en muchos años. De hecho, destacó que el fijo a término ronda ya el seis por ciento.

Además, la gerente de la Asociación Hipotecaria Española coincidió con expertos del Colegio de Registradores en que las expectativas de continuidad de este escenario están animando a la banca a apostar por las hipotecas a tipo fijo para, al menos, asegurarse un interés positivo y dotar de una mayor estabilidad a sus balances. Todo ello, según estos expertos, lleva a que se estén acortando las diferencias entre las hipotecas a tipo fijo y variable.

Aunque tradicionalmente presentaban unos intereses más elevados, además de unos plazos de amortización menores y unas condiciones inferiores de financiación, esta tendencia está cambiando con una política de tipos fijos por debajo del dos por ciento a 15 años y entre el dos y el 2,5 por ciento a 20 o más años. Desde la Asociación Hipotecaria Española remarcaron que estos costes son muy inferiores en comparación a los que la banca pedía hace unos años, por la tendencia negativa de los tipos de interés que esperan a corto y medio plazo.

Mientras en 2006 y 2007, los años en los que la burbuja inmobiliaria alcanzó su mayor expansión, los tipos fijos tenían en Castilla y León una presencia testimonial, en 2015 registraron un crecimiento importante, superando la barrera del seis por ciento, según los datos del Colegio de los Registradores de España. En los primeros meses de este ejercicio han moderado su crecimiento, respecto al cierre del anterior ejercicio, si bien se han incrementado respecto al primer trimestre del pasado año.

De hecho, los tipos fijos han sido elegidos en el cinco por ciento de los nuevos créditos hipotecarios sobre vivienda en la Comunidad. Este porcentaje es casi la mitad al registrado en el conjunto del país, donde se han disparado hasta representar durante el primer trimestre del año el 9,83 por ciento. En consecuencia, la contratación a tipo de interés variable se ha reducido, afectando al peso de contratación de todas las modalidades de índice de referencia.

Las comunidades autónomas con mayor presencia en contratación a tipo de interés fijo durante el primer trimestre han sido Murcia (17,1 por ciento), Baleares (16,03 por ciento), Cataluña (14,21 por ciento), Galicia (13,47 por ciento), Comunidad Valenciana (12,7 por ciento) y Asturias (11,13 por ciento). En el lado opuesto se colocaron Castilla-La Mancha (4,23 por ciento), Extremadura (4,6 por ciento) y Castilla y León, muy cerca de la Comunidad de Madrid (5,43 por ciento).

12 meses creciendo

La contratación a tipo de interés fijo en Castilla y León alcanza una media del 6,23 por ciento en los 12 meses entre abril de 2015 y marzo de 206, ligeramente superior al registro del primer trimestre. En España, el 7,92 por ciento de los nuevos créditos hipotecarios se formalizaron a tipo de interés fijo, frente al 92,08 por ciento a tipo de interés variable. Para este periodo las mayores cuantías de contratación a tipo de interés fijo se han alcanzado en Murcia (11,74 por ciento), Baleares (11,34 por ciento), Cataluña (10,55 por ciento) y Asturias (10,35 por ciento).

La tasa de variación interanual con resultados medios muestran un incremento del tipo fijo de 1,77 puntos porcentuales en Castilla y León. En todas las comunidades autónomas se ha incrementado, aunque lideraron los mayores incrementos Murcia (ocho por ciento), Baleares (6,78 por ciento), La Rioja (5,72 por ciento) y Galicia (5,36 por ciento).

Expctativas: superar el 10%

Los analistas del Colegio de Registradores sostienen que las hipotecas son un producto especialmente interesante para las entidades financieras en un escenario de bajos tipos de interés a corto y medio plazo, por lo que los contratos a tipo fijo les generan una mayor rentabilidad. En consecuencia, estiman que durante los próximos trimestres se producirá una continuidad en el crecimiento de la contratación a tipo de interés fijo, pudiendo rebasar la barrera del diez por ciento, nunca alcanzada hasta la fecha desde la elaboración de la serie histórica de resultados (2003).

Sin embargo, la gerente de la Asociación Hipotecaria Española Perspectiva recalcó que este producto crediticio está teniendo mucha penetración y calculó que este año registrará el máximo, aunque admitió que es posible que su expansión continúe el próximo año. El tipo fijo ha venido para quedarse bastante tiempo, recalcó Lorena Mullor, si bien indicó que en cuanto el BCE suba los tipos y el aumento se traslade a estos préstamos se reducirá su avance.

Producto atractivo ¿para quién?

El tipo fijo se ha convertido en un producto atractivo, pero sus ventajas varían en función de la aversión al riesgo del prestatario y de sus circunstancias económicas y personales, según recalcó Lorena Mullor de la Asociación Hipotecaria Española. En general, sostuvo que quien pueda amortizar, si gastos, el crédito en un corto plazo debería optar por una hipoteca variable, que en este momento se ofertan a un bajo tipo de interés, que puede rondar el uno por ciento.

Por el contrario, si el hipotecado decide abonar poco a poco su vivienda y quiere estabilidad sobre la cuota a pagar debería optar por un préstamo a tipo fijo, que en este momento presentan unos tipos del entorno del 2,5 por ciento, muy inferiores a los que la banca cobró hace unos años, cuando el Euríbor tocó techo.