Borrar
Nadia Calviño a partir de enero será presidenta del BEI. EFE
Los retos de Nadia Calviño en el 'banco europeo del clima'

Los retos de Nadia Calviño en el 'banco europeo del clima'

ODS 13 | Acción por el clima ·

El Banco Europeo de Inversiones es el arma financiera de la Comisión Europea para luchar contra el cambio climático dentro y fuera de las fronteras comunitarias

Jueves, 21 de diciembre 2023, 11:07

A partir del 1 de enero, Nadia Calviño deja Madrid por Luxemburgo; cambia el Ministerio de Economía, Comercio y Empresa por el Banco Europeo de Inversiones, también conocido como el banco del clima. «Apoyamos las prioridades de la Comisión Europea y ahora el clima es ... una de ellas», señala Esther Badiola, especialista en cambio climático del Banco Europeo de Inversiones. La futura directora del BEI pasa de gestionar más de 6.000 millones de euros a intentar movilizar cerca de 80.000 millones anuales hasta 2025. Aunque no es la primera vez que maneja estos números, ya que la, todavía, vicepresidenta primera del Gobierno de España antes de llegar al Consejo de Ministros de Pedro Sánchez fue directora general de Presupuestos de la Comisión Europea (2014-2018).

Con este nuevo puesto, Calviño será la encargada de desembolsar el dinero necesario en Europa para alcanzar las cero emisiones. «Y más allá, porque también financiamos proyectos en el exterior», apunta Badiola. En concreto, un 10% del total de préstamos, porque «el cambio climático es una prioridad dentro y fuera de las fronteras de la Unión Europea», destaca la economista española.

La vicepresidenta española tendrá que seguir con la hoja de ruta marcada en 2021 por el Banco Europeo de Inversiones y que finaliza a mitad de esta década con dos importantes hitos: la mitad de la financiación anual que otorga este organismo ha de estar destinada a temas relacionados con el clim y la inversión en acción climática y sostenibilidad ambiental en 2030 ha de ser de un trillón de euros, es decir un millón de billones.. «Estamos ya en el 58%», afirma Isidoro Tapia, experto senior en energía en el Banco Europeo de Inversiones. «Hace unos años, estábamos en el entorno del 25% o 30% y hemos hecho una labor muy importante desde el banco y también desde las propias empresas para este cambio», asegura.

El billón de euros es uno de los deberes que deja el actual presidente, Werner Hoyer, a Calviño, aunque los pasos dados hasta la fecha son los marcados en planificación del Banco Europeo de Inversiones. El año pasado, según las cuentas de este banco multilateral, se entregaron 38.000 millones de euros para descarbonizar la economía. «El BEI tendrá un papel aún más importante en el futuro para financiar la transición verde, proporcionar apoyo financiero para la reconstrucción de Ucrania y también respaldar el papel del euro», ha repetido en más de una ocasión la política española.

Financiación climática

Con casi 3.000 expertos entre sus filas, ellos son los encargados de supervisar los proyectos a los que llegan los euros de este banco del clima. «Raramente se financia la totalidad», afirma a este periódico Badiola. Entre los clientes del BEI se encuentran los gobiernos y «también muchas empresas privadas», apunta Tapia.

España, tras el cambio de visión del BEI, ha recibido más de 43.000 millones de euros en 504 operaciones para financiar proyectos relacionados con energía, transporte, industria, desarrollo urbano, salud, agua, telecomunicaciones… «Nosotros no tenemos líneas rojas, nos gusta más hablar de líneas verdes», señala Tapia. Aunque sí que la hay, porque este banco multilateral del clima no financia proyectos relacionados con los combustibles fósiles. «Así es desde 2019», apunta Badiola. «No hemos dado un solo euro para este tipo de proyectos y si se realiza se retira toda la financiación y se exige la devolución de todo el dinero prestado», destaca. «Fue una decisión arriesgada, pero mirando con perspectiva hemos conseguido incentivar la creación de proyectos verdes».

Los Estados miembros, accionistas

Cada proyecto que entra en el registro del Banco Europeo de Inversiones es examinado por más de 3.000 expertos, pero Calviño tendrá que lidiar con la gobernanza de este organismo multilateral. Los 27 estados miembros de la UE son accionistas del BEI y, además, son los que han dado el visto bueno a la llegada de la vicepresidenta española al sillón presidencial de este banco climático.

Un equilibro de poderes y fuerzas en la que dominan Alemania, Francia, Italia con un 18% y España está por detrás con un 11%. Calviño trabajará con la línea marcada por Hoyer de acelerar la transición verde, pero que chocará con los intereses de cada uno de los intereses nacionales de los accionistas.

Antes de verano, el Banco Europeo de Inversiones anunció el aumento de sus volúmenes de financiación para energía limpia a un nuevo récord y ampliará su apoyo extraordinario y específico a la creación de capacidad de fabricación para tecnologías netas cero estratégicas de última generación, entre las que no se incluye la nuclear.

El ministro de Economía francés, Bruno Le Maire, en varias intervenciones y declaraciones públicas ha asegurado que todas las instituciones europeas apoyen la energía nuclear y es una exigencia para la nueva etapa del BEI que en 2024 encabezará Calviño. El reglamento llamado de Taxonomía y su acto delegado permiten financiar la energía nuclear desde este año, pese a la fuerte crítica del Gobierno español actual, entre otros. No obstante, el BEI aún no se ha adaptado a ese reglamento y mantiene, de momento, lo nuclear fuera de su lista de proyectos elegibles.

Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios

leonoticias Los retos de Nadia Calviño en el 'banco europeo del clima'