Subastan ocho pisos en San Andrés del Rabanedo por una deuda de 1,5 millones de euros

Sacan a subasta pública ocho viviendas en San Andrés del Rabanedo. Los pisos, que varían en valor y superficie, se encuentran en un edificio que tiene tres entradas por tres calles diferentes en la localidad del alfoz de la capital.

Las viviendas se dividen en ocho lotes y están situadas en un bloque de dos plantas en la calle Corpus Christi y con las fachadas laterales que cuentan con otras dos entradas en la calle La Veguina y la calle Gabriel y Galán. Una de las viviendas, en el primero D, cuenta con un valor de tasación de 137.600 euros y un deposito de casi 6.900 euros.

Por otro lado, uno de los pisos que tiene su acceso a través del portal 2 de la calle Corpus Christi, y se encuentra situada en la derecha según desembarque de escalera, en el piso segundo tiene un valor de subasta de 125.000 euros y tampoco cuenta con puja mínima. Por su parte, una de las viviendas más baratas se sitúa en la calle Gabriel y galán y cuenta con un valor de subasta de 108.000 euros.

Los pisos están actualmente ocupados por una empresa con sede social en Sevilla, según las diligencias de ordenación del Juzgado de primera instancia de León.

La empresa León Urbana S.A., actual propietaria, tiene una hipoteca con el Sareb que es quien promueve la subasta para recuperar el dinero adeudado. Pero los derechos de uso y explotación de los ocho pisos están en manos de la mercantil Construcciones Trazor.

Además de estas cargas, hay una anotación preventiva de embargo a favor del ayuntamiento de San Andrés en reclamación de 22.100 euros.

La subasta se lleva a cabo por la vía de apremio motivada por el Juzgado de primera Instancia número 5. La vía de apremio, o procedimiento de apremio es la última fase de la ejecución forzosa cuya finalidad, partiendo de los bienes embargados, es obtener el dinero para hacer pago de la cantidad debida al ejecutante.

En este caso, la empresa propietaria de los inmuebles adeuda 1,5 millones de euros de deuda. Por lo tanto, el apremio busca que el deudor, que ha sido condenado a pagar a su acreedor una cantidad cierta y determinada de dinero y que no lo ha hecho voluntariamente, satisfaga esta deuda con sus bienes.

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