Los pasillos del Martínez Gadañón se inundan con las últimas lluvias

Las lluvias de los últimos días han despertado los viejos fantasmas del Martínez Gadañón, el colegio público de San Andrés del Rabanedo, donde las goteras que ya habían sido advertidas hace meses han vuelto a brotar agua.

El pasillo de las aulas de segundo de Primaria aparecía anegado y lleno de cubos y fregonas para recoger el agua de lluvia que se empezaba acumular tras las precipitaciones de la última noche.

Así lo han podido atestiguar los padres que han ido a llevar a sus hijos a las clases, mostrando como «grandes goteras» emanaban agua. Un problema que ya ha sido trasladado al Ayuntamiento de San Andrés y a la Dirección Territorial de Educación de la Junta. «Hasta que no ocurra una desgracia, nadie pondrá dinero para arreglarlo», denunciaba una de las madres. «Es un peligro para los niños y los profesores».

La situación se repite en el centro del alfoz de León. Ya en octubre de 2024 una delegación del sindicato CGT visitaba el Teodoro Martínez Gadañón y recogía en un informe los principales problemas derivados de las goteras de la cubierta. Según dicho documento, los canalones de desagüe «no dan a basto» con el caudal que se acumula en un tejado tan extenso.

Para subsanar este problema se pedía la instalación de nuevos canalones, que se reparasen las goteras y se pintasen los interiores del edificio.

El informe recogía goteras en la planta alta del ala noroeste con afectación al aula del cuadro con girasoles, el pasillo y la sala de profesores. Además, la fachada también aparecía deteriorada por falta de mantenimiento y el gimnasio registraba problemas.

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