Mucho más que vender el 'Satisfyer'

Que la cita se fije para el viernes no es casual. «Los lunes son de no parar, es imposible poder hacer un hueco con todo el movimiento que suele haber», explica por teléfono el CEO de Integra Media, Héctor Rubio. El viernes tampoco es que paren. Ni mucho menos.

En la entrada recibe Diego González, el director de márketing. A priori, aquello es una oficina en la que trabajan frente al ordenador varias decenas de jóvenes. Nada hace sospechar que entre llamadas, gestiones y diseños se esconde la empresa que ha logrado facturar dos millones de euros desde Trobajo del Camino en sus primer año de andadura. Y lo ha hecho revolucionando un mundo que parecía monolítico.

Ha pasado algo más de un año desde que los dueños de Integra Media, tras varios estudios de mercado «y quizá por algunas dosis de casualidad», como confiesan, dieran con la clave: dar una vuelta al producto erótico liberándolo de la sordidez para sustituirla por un punto de sofisticación. Así nació Erotic Feel en febrero de 2019.

«Llevamos ya catorce años de trabajo de los que ocho o nueve son de volcarse en el mundo del comercio electrónico», apunta Héctor Rubio.

Con WebCartucho, una tienda online de productos de oficina, lograron posicionarse con fuerza en el mercado nacional... Pero el reto era ir a más. «Queríamos diversificar nuestro trabajo en otro proyecto totalmente diferente y que aportara un valor añadido que no nos aportaba el proyecto actual».

Sobre la mesa de una de las salas hay un micrófono de locución, un ordenador. Dos profesionales de Erotic Feel (uno de ellos inglés nativo) graban la voz en off de un vídeo explicativo en el idioma de Shakespeare. La apuesta por sacar todo el partido a YouTube, trabajar con influencers y la fidelización en redes sociales es clara.

«Una cosa que queríamos hacer era que no fuera un supermercado erótico y ya está, queríamos tratar el producto de forma cuidada y mimada y realmente hacer marca Erotic Feel, que fuera una experiencia de compra y cuidado del producto», confiesa el CEO. La opción fácil no entraba en los planes. Nada de ir al mayorista de productos eróticos y comprarle mercancía, ponerla a la venta y ya está. Erotic Feel quiere ser otra cosa. «Nosotros tenemos que contactar con las marcas, trabajar de forma directa y las hay muy inaccesibles. Lelo, por ejemplo, es una marca muy complicada difícil para trabajar con ella de forma directa y creo que somos el único punto de venta a cliente final en España».

La elegancia es un punto a favor, lo que no impide que también entren en juego marcas más económicas. «Tratamos a todas de forma exclusiva para que sientas que entrar en un sex-shop no es entrar en un sitio sórdido, también puede ser distinguido. Yo le digo a mi equipo que si montamos una tienda física algún día no te irías al típico sitio escondido, podrías montarla en una calle principal y que no crear ningún escándalo», confiesa Héctor.

Y es que la idea es clara. «Son productos que tienen mucho que ver con la cosmética y la belleza, hay que mirar más allá y aunque sea un producto erótico es algo que todos necesitamos y se puede trabajar de otra manera».

A pesar de no haber cerrado aún un ciclo completo de un año, Erotic Feel alcanza en el momento de máxima actividad entre 10.000 y 12.000 pedidos mensuales, mientras en épocas más tranquilas, como es el verano, no bajan de los 3.000.

La facturación no se queda atrás. En los primeros doce meses lograron alcanzar prácticamente los dos millones de euros con la marca. «Lo que hicimos desde el primer momento fue internacionalizar, internet te permite extrapolar la idea a los países, cada uno necesita su trabajo y en cada uno funciona una cosa, en el tema sexual los gustos cambian mucho de un país a otro», apunta el CEO de Erotic Feel.

Al segundo mes de nacimiento la empresa se abrió a nueve países de Europa y ahora el objetivo es Latinoamérica. «Llevamos vendiendo a varios países desde junio y estamos en marcha para abrir un almacén en México y empezar allí una expansión local gestionada desde aquí pero con presencia física allí».

43 personas componen el Grupo Integramedia, de las que una veintena se vuelcan en Erotic Feel.

Erotic Feel ha vivido en primera persona el cambio en el negocio en internet. «El comercio online ha evolucionado en unos meses lo que tenía que haber evolucionado en tres o cuatro años», confiesa Héctor Rubio, que asegura que en este sector «la competencia física no es tan feroz como en otros sectores, la gente se ha acostumbrado a comprar por internet y eso al final se está notando».

Sobre los productos estrella, el mercado español está copado por un nombre más que conocido: el Satisfyer. «Fuera de aquí no es para tanto, hay países donde apenas lo conocen. Satisfyer es una marca con una gama de productos y sí es la más vendida. ¿La mejor? No es una marca de alta gama, al final su éxito radica en su precio ajustado y tenemos marcas que un usuario más experimentado en este tipo de productos demanda más», explica el director general.

A diferencia de los sex-shops de España, los clientes de Erotic Feel se reparten en igual porcentaje entre hombres y mujeres, en un sector en el que la balanza habitualmente se inclina de forma notable hacia ellas.

El trabajo no cesa a pesar de ser viernes en un almacen que exporta a un buen número de países. Porque a pesar de las diferencias locales, el placer sigue siendo motivo de interés y de compra. Y, por qué no, también de una innovación que le saque de la oscuridad.

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