La calcificación de la estructura del centro de salud de Pinilla retrasa su apertura al menos un año sobre el plazo previsto

La calcificación de la estructura supone el deterioro progresivo del aglomerado y la estructura metálica. La misma deriva de severos procesos de humedad, según han recordado a leonoticias empresarios del sector, y desemboca en una debilidad estructural que en los casos extremos puede obligar a la demolición de la estructura en su totalidad.

Con la calcificación detectada fue el pasado mes de noviembre cuando se procedió a la paralización de la obra de reforma, una paralización que aún hoy es visible.

Y la razón de este parón no es otro que las discrepancias entre la empresa adjudicataria de los trabajos, valorados en 2,5 millones de euros, y la Consejería de Sanidad, que ahora espera un informe que confirme la situación del inmueble y que se ve en la obligación de abrir un nuevo proceso administrativo que permita reanudar las obras de adecuación.

Desde dicha entidad autonómica aseguran que, actualmente, se trata de llegar a un acuerdo con la empresa para poner fin al contrato de adjudicación.

De este modo podrían sacar a licitación un nuevo contrato con el proyecto de tratamiento de la estructura y en el siguiente paso continuar con las obras, aunque se desconocen los plazos. Lo cierto es que los 18 meses previstos se alargarán más de un año.

Según ha podido saber este medio, fue la empresa adjudicataria la que estimó que harían falta medio millón de euros de inversión 'extra' para evitar el derrumbe del inmueble. Mientras, Sacyl señala que el medio millón de euros que plantea la empresa en realidad solo serán 100.000 euros, una cifra que ha obtenido tras contrastar con otra empresa. Esa división de criterios es la que ahora ha provocado la rotura de las negociaciones.

Ahora la Junta de Castilla y León debe decidir entre volver a sacar a licitación la rehabilitación de este centro de salud con la indemnización que supondría a la empresa, o derribar el antiguo edificio.

Son un total de 21.516 usuarios los que tienen su tarjeta sanitaria en este centro y que ahora acuden al Hospital San Juan de Dios, donde Atención Primaria alquiló parte de las instalaciones por 7.030 euros mensuales.

Lo cierto es que, según aseguran desde la asociación de vecinos, esta solución no es la más óptima debido la avanzada edad de algunos de los usuarios así como la falta de renovación del material sanitario.

Por esta razón, dicha entidad vecinal ha solicitado una reunión con la Consejería de Sanidad para conocer el estado de este problema. «El Ayuntamiento de San Andrés se ha ofrecido a acompañarnos, pero el de León solo a estar pendiente», aseguran desde la asociación que recuerda que el barrio se divide entre los dos ayuntamientos.

Además, la asociación ha abierto una campaña de firmas en la página web change.org exigiendo una solución inmediata a este problema.

Cabe recordar que el edificio data de 1973 y los problemas de su estructura eran conocidos debido a las grietas existentes en el mismo.