San Andrés asegura trabajar en la puesta a punto del edificio Araú, siete años después de la finalización de la obra

La histórica fábrica de embutidos es propiedad del consistorio de San Andrés desde mayo de 2000, cuando se firmó un convenio con los propietarios para que cedieran al Ayuntamiento el inmueble a cambio de la recalificación de los terrenos para la construcción de 300 viviendas a su alrededor.

Ahora, la suciedad puebla las entradas de este inmueble declarado Bien de Interés Cultural, y catalogado dentro del Patrimonio Histórico del Camino de Santiago. Y es que aparte de servir de zona de esparcimiento para los más pequeños vecinos, la suciedad, el abandono y las pintadas pueblan sus múltiples accesos como suele ocurrir cuando no se le da contenido a uno de los edificios más emblemáticos de una localidad que no tiene muchas construcciones de las que presumir. Y es que el Edificio Araú lleva años esperando una mejor vida a pesar de ser un ejemplo de arquitectura industrial del siglo XIX y funcionar hasta 1992.

Las obras, cofinanciadas por el Gobierno de España con 6 millones de euros, se llevaron a cabo en los cuatro edificios del inmueble. En el Edificio 1, originalmente destinado a vivienda y oficinas, se creo un espacio para biblioteca con salas de lectura en tres plantas. Los Edificios 2 y 3 albergan en la planta baja el vestíbulo principal de acceso y una oficina de turismo. Las plantas superiores dan cabida a distintas salas de exposiciones. Antiguamente el edificio 2 era el paso de enlace entre las viviendas (edificio 1) y el secadero (edificio 3).

En el Edificio 4, antes nave, se ubica una sala de exposiciones, zonas de instalaciones y almacenes mientras que en la parte posterior del conjunto de edificios, sobre la calle Sira Sampedro, se situa el auditorio semienterrado.

Lo cierto es que el Ayuntamiento de San Andrés del Rabanedo asegura estar trabajando para su próxima apertura, con el objetivo de dotarlo de una actividad similar a la que fue concebida en su rehabilitación.

Aunque desde el consistorio no se atreven a dar fechas para dicha reapertura debido a los continuos retrasos que arrastra a sus espaldas, si destacan que los trabajos pendientes son menores por lo que la fecha podría estar próxima.

Uno de los problemas con los que se encontraron es que la empresa que realizó la obra no dejo libro técnico puesto que quebró. «Ahora lo están ejecutando los técnicos municipales», destacan desde el consistorio quienes afirman que también trabajan en el sistema eléctrico. Para estas labores, es la empresa adjudicataria del servicio de alumbrado municipal la que está elaborando un informe sobre las deficiencias lumínicas del edificio y que después realizará los trabajos.

El consistorio de San Andrés si tiene claro qué sentido le dará, puesto que será similar al que se concibió desde un primer momento, ser el centro cultural de Trobajo del Camino y además el punto de información y referencia del Camino de Santiago en el municipio. Con el objetivo de dotar de una programación estable y diferencial, pero siempre vinculada al Camino de Santiago y a diversas manifestaciones artísticas y culturales, el Consistorio está avanzando ya para convertir el edificio en eje cultural de la Ruta Jacobea.

Cabe recordar, además, que el ayuntamiento destinó 30.000 euros del remanente de tesorería para la adquisición de material de artes escénicas y adecuación del auditorio. «Queremos que sea un eje cultural del Camino de Santiago con exposiciones tanto temporales como permanentes. Seguramente se ubique aquí la escuela de música municipal y sea un punto de información para los peregrinos», destacan desde el equipo de gobierno.

Lo cierto es que los vecinos de Trobajo esperan que pronto este emblemático edifico cuente con la vida cultural que merece.