Drotium ‘teje’ en León la revolución de los coches sin conductor, que prevé crear 10.000 nuevos empleos

Buena muestra de ellas es que gigantes tecnológicas y fabricantes de vehículos, como Google, Uber, Tesla, Ford o BMW, ya hayan mostrado su interés por hacerse con el negocio del vehículo autónomo, o que los mayores expertos mundiales hablen de un plazo de entre cinco y diez años para que los concesionarios venda los primeros coches autónomos.

Una revolución industrial de la que León no sólo quiere ser protagonista sino actor principal. Lo quiere de la mano de Drotium, una empresa vinculada a la Universidad de León y que nació bajo el amparo de AUVSI -asociación internacional para vehículos no tripulados- con el objetivo de automatizar el transporte aéreo, terrestre y marítimo.

Una compañía que se ha incubado el edificio MIC -Módulo de Investigación Cibernética- de la Universidad de León, donde actualmente trabajan unas 80 personas que, casi en silencio, durante tres años han sentado las bases para implantar un proyecto de base tecnológica con el reto de que León sea la punta de lanza de la nueva era del transporte.

Para ello, la compañía tiene proyectado el desarrollo un circuito experimental para la conducción de vehículos autónomos, el primero a nivel nacional y europeo. Un proyecto que se desarrollaría en el campus de la Universidad y que, en una fase inicial, contemplaría cinco kilómetros de extensión.

En él y en horario nocturno, se probaría la monitorización de los vehículos a través de lo que se conoce como ‘Centro de Gobierno Nertra’, desde el que se organizaría y regularía el tráfico y desde donde se podría asumir remotamente el control del vehículo, evitando de esta forma cualquier accidente.

Además, a través de un software se realizará una actualización del vehículo conforme a la situación real de la vía que contaría con una red de sensores, de esta forma, por ejemplo, sería imposible que un turismo invadiese una acerca o arrollará a un peatón. Es el germen de lo que se conoce como el ‘tráfico transparente’ frente a la opacidad que existe en la actualidad en nuestra carreteras.

Un proyecto que, por el momento, está en la nevera, a pesar de que Drotium ya se encuentra inmerso en el desarrollo de una red en toda la capital leonesa.

“Estamos en una fase bastante desarrollada tras tres años de trabajo. Nuestro objetivo es empezar desde León este proyecto de país, queremos que nuestra ciudad sea la punta de lanza”, señala Sergio Martínez, director de formación. El reto, lograr que a finales del 2018 primeros del 2019 esté puesto en marcha el circuito.

Sin embargo, el tiempo corre en contra de este objetivo. La compañía sigue a la espera a que las instituciones muestren su convicción de este proyecto y, por ende, apoyen y autoricen el desarrollo de este circuito terrestre que ya ha despertado el interés en otras ciudades en las comunidades de Cantabria, Andalucía o Galicia.

“Estamos a tiempo de que León sea hito. La oportunidad es ahora porque hay que está esperando”, señalan desde la dirección de Drotium, que lamentaría tener que abandonar el proyecto de León para incubarlo en otra ciudad de España. Al fin de cuentas, entre sus objetivos está impulsar el crecimiento de León a través de la creación de empleo de calidad y cualificado.

Y no están hablando de unas decenas de puestos de trabajo. La dirección de la compañía estima que el desarrollo de una primera red en España requeriría de unos 10.000 trabajadores. Una previsión que se podría alcanzar, según barajan, en el plazo máximo de diez años.

“León está en muy bien posición desde un punto de vista tecnológico. Tiene los mimbres y ahora solo necesita un empujón. Estamos hablando del futuro de León dada la trascendencia que tendría 10.000 puestos de trabajo para una ciudad como León”, remarca desde la dirección de Drotium.

Porque, como dice el refrán, no hay más ciego que el que no quiere ver, la realidad es que el futuro del transporte pasa por la conducción automatizada. Y así lo ha visto la Dirección General de Tráfico ha mostrado su respaldo absoluto a la labor desarrollada por Drotium. Principalmente, remarcan, por el transporte sin conductor es sinónimo de “cero contaminación, cero embotellamiento y cero siniestralidad”.

Y precisamente es eso, reducir a cero la tasa de mortalidad en las carreteras, el principal y gran objetivo de la DGT. De ahí el impulso y apoyo a la empresa leonesa. “La DGT entiende que éste es el futuro, principalmente porque es una necesidad”.

En este sentido, Drotium ha anunciado que a corto y medio plazo tiene previsto su salida en bolsa con el objetivo de impulsar el sector a través de la apertura de un nuevo nicho de mercado. “Estamos preparados para poner la tecnología al servicio de los ciudadanos, constituir este gran proyecto y que los ciudadanos se suban al carro de la nueva era del transporte.

Por último, desde Drotium reconocen ser conscientes del rechazo que puede generar este planteamiento, al fin de cuentas, reconocen que suena a ciencia ficción. Sin embargo, recuerdan ejemplos semejantes en la historia, como la evolución de los teléfonos móviles. Al fin de cuentas, hace diez años nadie pensaba tener un smartphone en su bolsillo o llamar gratis a cualquier persona en cualquier lugar del mundo.

“Es normal tener miedo a los cambios pero en el futuro todo será más sencillo. Ahora tenemos que conducir el coche, sacar el carnet, sufrir contaminación y atascos. En un futuro solo nos tendremos que subir al coche e indicarle a dónde queremos ir. A partir de ahí, disfrutar de un viaje mientras desarrollamos cualquier otra actividad”.

Un futuro, cada vez más presente, que desde Drotium quieren que se escriba desde León