La Policía francesa investiga si el cerebro de los atentados murió en Saint Denis

Este último extremo lo han apuntado la web Político, citando fuentes belgas, y el diario 'The Washington Post', en base a fuentes de inteligencia, quienes señalan que ese tercer fallecido que sería el presunto cerebro de los atentados de París, Abdelhamid Abaaoud, aunque este extremo no ha sido confirmado oficialmente. Sobre este asunto, Molins sólo ha manifestado que Abaaoud no forma parte de los arrestados hoy en el asalto al edificio.

Abaaoud, de 29 años y nacionalidad belga, fue condenado en julio de este año por un tribunal de Bélgica a 20 años de cárcel por su vinculación con una red yihadista. La condena fue dictada en ausencia del acusado, que figuraba como huido a Siria.

"Parecía que estábamos en guerra". Explosiones, ráfagas de disparos, despliegue de soldados y helicópteros despertaron el miércoles de madrugada a los habitantes del centro de Saint Denis, ubicado en la periferia de París, por una operación de las fuerzas de seguridad francesas vinculada a los atentados de viernes que ha durado siete horas. El operativo se ha saldado con dos terroristas muertos, cinco agentes heridos y ocho detenidos siete hombres y una mujer. También ha fallecido una perra policía.

Los terroristas pretendían atentar contra La Défense, pulmón financiero de capital y el centro de negocios más importante de Europa. "Preparaban un acto próximamente, un atentado contra La Défense, de acuerdo con las informaciones de la SDAT (Subdirección Antiterrorista francesa) y del extranjero", ha asegurado a Reuters una fuente de la investigación.

El portavoz del Gobierno francés, Stephane de Foll, ha señalado que ha sido "una operación determinante y ha podido hacerse por la noche gracias a que está en vigor el estado de emergencia". El portavoz ha informado de que Hollande ha hablado de "la situación de guerra" y de la operación policial "que se desarrolló esta noche", así como de la necesidad de garantizar "la protección de los franceses".

Entre los dos muertos confirmados del operativo hay una mujer kamikaze -algo sin precedentes en Francia- que hizo estallar su chaleco con explosivos cuando los agentes lanzaron el asalto en el apartamento en que se encontraba, ha precisado la Policía, que buscaba al presunto cerebro de los atentados que dejaron 129 muertos, cuando se encontró con más sospechosos.

La mujer, que podría ser prima de Abaaoud, según una fuente próxima a la investigación, ha sido identificada como Hasna Aitboulahcen por la cadena francesa iTélé. Tenía 26 años y nació en la localidad francesa de Clichy-la-Garenne, en los suburbios del norte de París. Efectuó una llamada telefónica antes de inmolarse, han informado la cadena RTL y la televisión TF1. Esto hace temer a los investigadores que podría tener cómplices a los que estaría avisando de la presencia policial. El hombre que alojó a los detenidos en el apartamento ha revelado a los investigadores que había alojado a otras tres personas, cuyo paradero se desconoce. Este hombre, identificado como Jawad B., fue condenado en 2008 por el asesinato de su mejor amigo, y ahora los investigadores intentan averiguar su relación con los terroristas.

"Se usaron armas de guerra, fusiles de asalto, granadas, cinturones de explosivos... Fue un auténtico combate que duró varias horas y que ha dejado en el interior un gran amontonamiento de escombros", ha manifestado el portavoz del ministerio del Interior galo. En ese sentido, Brandet ha señalado que "hay que avanzar con mucha minuciosidad para no pasar por delante de elementos que puedan tener importancia en la investigación".

Ráfagas de disparos

Una explosión sobresaltó a los vecinos a las 04.20 horas del miércoles, después se escucharon ráfagas de disparos y la Policía entró al edificio, sito en la avenida République 112.

Varias personas se atrincheraron en un domicilio de esa ciudad del extrarradio parisino, en un edificio de seis plantas, donde tres personas ya han sido detenidas, mientras que otras dos han sido apresadas en apartamentos vecinos y dos más en las inmediaciones. Uno de ellos ha sido ingresado de urgencia en un hospital de Bobigny, al noreste de París, han informado fuentes médicas.

En total las fuerzas de seguridad francesas detuvieron la pasada madrugada a 25 personas y realizaron 118 registros, en los que se incautaron de 34 armas, según ha informado el Ministerio del Interior en un comunicado. El balance de las tres últimas noches es de 60 detenidos y 414 registros administrativos, en las que se han hallado un total de 75 armas, once de ellas de guerra.

Hayat, de 26 años, pasó la noche en casa de unos amigos, en la calle donde tuvo lugar el asalto. "Fue justo cuando salía", hubo "disparos", "pensé que era un ajuste de cuentas", comenta. "Pero los disparos continuaron, llegaron muchos refuerzos y acordonaron la avenida de la República. Parecía que estábamos en guerra", asegura. "Pudo haberme alcanzado una bala".

Los vecinos ocupaban las calles, algunos sin apenas ropa, tras haber sido desalojados de las viviendas de toda la manzana a las siete de la mañana. En torno a las 07.30 horas seguían escuchándose explosiones. Unos cincuenta militares estaban apostados a la entrada del perímetro de seguridad, con fusiles de asalto. Al alba, un helicóptero seguía sobrevolando la zona. Los soldados continuaban desplegados, junto con decenas de furgones de la policía y de los bomberos. La última gran detonación se ha escuchado a las once de la mañana.

Un treintañero que ha pedido conservar el anonimato ha explicado que el asalto había sido en su apartamento, en la calle de Corbillon número 8. "Un amigo me pidió que alojara a dos de sus colegas unos días", cuenta. "Le dije que no tenía colchón, me dijeron 'no importa', sólo querían agua y rezar", explica. Mi amigo "me dijo que venían de Bélgica". "Me pidieron un favor. Lo hice; no sabía que eran terroristas", asegura el hombre, muy agitado, antes de que la policía lo esposara y se lo llevara.

El Ejército de Francia envió a dos compañías de la operación 'Sentinelle', integradas por alrededor de un centenar de efectivos, a la zona de la operación, un barrio de estudiantes y una calle comercial que es limítrofe con un barrio problemático conocido por el tráfico de drogas. Los colegios y las guarderías de Saint Denis permanecieron cerradas ayer.