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Javier Fernández Arribas
Viernes, 13 de enero 2017, 10:45
Trump y los servicios de inteligencia en Estados Unidos han abierto una crisis de confianza mutua con unas consecuencias impredecibles pero seguro que nada buenas. Y en medio el presidente ruso, Vladimir Putin, ex jefe del KGB moviendo hilos para desestabilizar a su gran enemigo ... norteamericano. Es de gran torpeza pensar que los votos te permiten hacer y decir lo que se te viene en gana porque estás abordando un tema de suma importancia y de una delicadeza extrema que exige un algo grado de confianza, que si se pierde es muy complicado de recuperar.
Trump no engaña a nadie, es como es y actúa como le interesa y le ha proporcionado los votos para llegar a la presidencia pero esa actitud le pasará factura más pronto que tarde mientras el daño que haya podido ocasionar va a ser difícil de recuperar. La inestabilidad que crea Trump nos afecta a todos.
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