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Y mi voto ¿para qué sirve?
Los ciudadanos decidirán quienes serán los 84 procuradores de las Cortes, los concejales de 2.248 municipios y, de forma indirecta, las diputaciones
Una urna de las que se utilizarán hoy, preparada días atrás en la Delegación del Gobierno.
Una urna de las que se utilizarán hoy, preparada días atrás en la Delegación del Gobierno.
Susana Escribano
24/05/2015 (10:07 horas)
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Las papeletas que salgan esta noche de las urnas de las 4.725 mesas electorales de Castilla y León decidirán 12.900 concejales en 2.248 municipios y 84 procuradores autonómicos. Y de forma indirecta, en función del reparto de concejales entre los distintos partidos judiciales, los integrantes de los plenos de las nueve diputaciones provinciales de la comunidad.

La primera vez que se superaron los dos millones de posibles votantes fue en 1987. Se alcanzaron los 2.007.117. La participación aquel año, además, fue altísima. Un 71,94% ejerció su derecho al sufragio.

Además de la que elija para poner un alcalde en su pueblo o ciudad, hoy tendrá la oportunidad de escoger una papeleta con una lista de aspirantes a parlamentarios autonómicos e introducirla en la urna. Seguro que del valor del primer gesto está convencido, que le resulta más cercano, sobre todo si vive en un municipio en el que tiene trato directo con el alcalde y los concejales, que son muchos en Castilla y León. Puede que de la efectividad de la papeleta autonómica recele más.

No se engañe. A lo mejor las Cortes le parecen una institución más distante y emocionalmente le resulta más fría, pero en su hemiciclo se deciden cuestiones que le afectan de lleno, desde la organización del trabajo de médicos y enfermeras y las prestaciones sanitarias que recibirá como paciente a la dotación de colegios e institutos o los servicios que ayudan a sobrellevar a personas que no se valen por sí mismas esa situación de dependencia.

Y más cosas. Iniciativas orientadas a la búsqueda de un empleo y a impulsar la actividad empresarial, de pago de impuestos, ayudas de vivienda y programas de rehabilitación, apoyo al transporte público, programas de desarrollo rural, la atención cuando ante una emergencia marca el teléfono 112, la protección del patrimonio artístico y del patrimonio natural, caso de la lucha contra incendios, o el impulso del turismo... Y suma y sigue. En Madrid, el Gobierno central y el Congreso y el Senado deciden sobre muchas cuestiones, pero en Castilla y León, la Junta y las Cortes, también.

El 13 y el 16 de junio

Todo eso está en juego al elegir a los 84 procuradores que se sentarán en las Cortes de Castilla y León cuando el 16 de junio celebren su primera sesión, la de constitución de la Cámara.

El parlamento tramita los proyectos de ley que envía la Junta y puede impulsar leyes a iniciativas de los grupos políticos. Los procuradores eligen al presidente de la Junta, aprueban el presupuesto anual en el que se distribuyen las partidas que gestionarán las consejerías (desde las becas de libros a los viajes del Club de los 60, pasando por el mantenimiento de los más de 11.000 kilómetros de la Red Autonómica de Carreteras) y, además de la función legislativa, tienen encomendadas tareas de control al Gobierno autonómico en comisiones y plenos.

Una labor sobre la que se ciernen propuestas novedosas en los programas electorales para reforzar, sobre todo, esa tarea de control (como cambiar el procedimiento para facilitar la apertura de comisiones de investigación después de haber planteado 26 en los últimos años sin que saliera adelante ninguna) y la participación de ayuntamientos, asociaciones y ciudadanos en general. También incorporar enero y julio a los meses de trabajo parlamentario ordinario. Ahora, junto con agosto, son lo que en jerga política se denomina periodo inhábil. No hay comisiones ni plenos salvo excepciones para asuntos muy concretos y ligadas, generalmente, a avanzar en la tramitación interna de proyectos de ley, pero no en el control a la Junta. Junto a la producción legislativa y al control de Ejecutivo, las Cortes tienen también la potestad de nombrar tres senadores en representación de Castilla y León.

Los concejales madrugarán algo más que los procuradores para tomar posesión de su cargo. Los ayuntamientos se constituirán el 13 de junio, salvo que haya habido recursos contra la proclamación de los concejales electos. En este segundo caso, la fecha en la que echarán a andar esas corporaciones municipales está fijada para el 3 de julio.



PARA SABER MÁS

2.136.786
votantes

podrán votar en las elecciones autonómicas y municipales en Castilla y León. Es el censo definitivo.

En el inicio. No siempre han sido tantos los votantes. En las primeras elecciones municipales de la democracia, aún con la comunidad autónoma de Castilla y León sin constituirse, podían votar 1.871.003 habitantes, 292.783 votantes menos de los que podrán hacerlo este domingo.

La marca. La cifra de arriba no es, sin embargo, la más alta. El récord se estableció en 1999.Entonces, 2.185.507 castellanos y leoneses podían ejercer su derecho al voto en la región. Unos 22.000 más que hoy.

La primera vez que se superaron los dos millones de posibles votantes fue en 1987. Se alcanzaron los 2.007.117. La participación aquel año, además, fue altísima. Un 71,94% ejerció su derecho al sufragio.


 

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