Los trabajadores en San Andrés, además, han acusado a la oenegé de haberse estructurado en una “jerarquía antidemocrática” que impide a los escalafones inferiores como los propios voluntarios trasladar su desacuerdo con las decisiones de funcionamiento que se toman a nivel de la organización.
Esta nueva concentración se debe a “nuevas infracciones cometidas día tras día” como “el cambio de las cerraduras sin entregarnos copia de las llaves nuevas, dejarnos sin vehículos y sin dinero de la cuenta corriente, disolver el órgano directivo, trasladar a los voluntarios a otra asamblea situada a 30 kilómetros de la nuestra sin ni siquiera consultarlo ni comunicarlo, menosprecio a los voluntarios por parte de asalariados de Cruz Roja en León. Una falta de respeto total y absoluta”, aseguran.
Igualmente está la prohibición de atender urgencias que no sean comunicadas por el Centro de Emergencias de Valladolid, “ni siquiera a petición de la policía, cosa que podría incurrir en un delito de denegación de auxilio”.
Este sábado está prevista una comparecencia de prensa del presidente provincial de Cruz Roja en León, José Ignacio de Luis Páez, para hacer una valoración sobre la situación generada en San Andrés del Rabanedo al respecto del cierre de la asamblea.
Numeroso público ha acudido a la concentración de este viernes.
Los voluntarios, durante la concentración.