Los médicos están realizando las pruebas necesarias al religioso ya que el paciente del que se guarda el suero localizado en Alemania está afectado de hepatitis B, por lo que se está avaluando la compatibilidad del tratamiento “por motivos de seguridad”.
Así lo dio a conocer este mismo lunes el responsable del centro de Alertas y Emergencias de la Dirección de Salud Pública del Ministerio de Sanidad, Fernando Simón, quien explicó que “cuando todo esto esté aclarado, probablemente mañana, los médicos tomarán esa decisión que será clínica”. En todo caso, la decisión final será del propio misionero que será el que tenga que aceptar o no el tratamiento, ya que son todos experimentales y carecen de ensayos fiables “ni de seguridad ni de eficacia”.
La directora general de Salud Pública, Mercedes Vinuesa, compareció este lunes para dar a conocer algunos de los detalles de la repatriación del médico perteneciente a la Orden de San Juan de Dios, e informó de que en estos momentos la Organización Mundial de la Salud reconoce tres tratamientos para los enfermos de ébola: el suero del paciente convaleciente, el fármaco ZMapp y el TKM, todos ellos en fase experimental ya que “el ébola no tiene un tratamiento específico, es de soporte”. Vinuesa subrayó además que se trata de “una enfermedad con una alta letalidad”, que asciende al 49 por ciento.
En cualquier caso, “el pronósitco siempre mejora aunque éste sea incierto y malo” afirmó el director de Atención Primaria de la Comunidad de Madrid, Antonio Alemany, sobre las posibilidades de recuperación del misionero de origen leonés.
Una obligación
Hemos respondido a la obligación de repatriar a un ciudadano español”, declaró la directora de Salud Pública, perteneciente al departamento de Ana Mato, en una operación que se ha llevado a cabo por el Ministerio de Defensa con “agilidad” desde que se recibiera la petición de la repatriación el sábado por la tarde, y en la que se han verificado que “las condiciones se cumplen” en cuanto a la bioseguridad del traslado, por lo que Vinuesa indicó que “prácticamente, el riesgo es nulo para la población española”.
El traslado se produjo “sin incidencias” en un avión de las Fuerzas Armadas que aterrizó en Madrid alrededor de las 03:00 horas de este lunes. Al llegar, Manuel García Viejo bajó “consciente y estable” y fue trasladado en una ambulancia hasta el Hospital La Paz-Carlos III escoltado por las fuerzas de seguridad de la Comunidad de Madrid.