La falta de material para adaptar el sistema a las nuevas frecuencias es la razón por la que aproximadamente un millón de usuarios en toda España dejarán de sintonizar estos canales, fundamentalmente en las comunidades de propietarios que requieren un nuevo módulo para poder acceder a toda la oferta televisiva.
“Las personas que tienen centralitas en edificios pequeños con hasta 15 vecinos podrán verlo y en los pueblos en las viviendas unifamiliares también, el problema es en las comunidades de propietarios que tienen sistemas modulares con un amplificador por canal y que no disponen de los nuevos módulos por falta de suministro”, puntualiza Jesús Luque, presidente del Colegio de Administradores de Fincas de León.
La falta de material afecta no sólo a la provincia, sino también al resto de España e incluso en otros países límitrofes como Francia, donde los instaladores han recurrido para hacerse con los nuevos equipos sin éxito.
Debido al volumen de viviendas que se verían afectadas por esta situación, son muchos los colectivos, incluido el Consejo General de Administradores de Fincas, los que reclaman una moratoria hasta el 31 de marzo para dar tiempo a que lleguen los suministros, aunque según manifiestan, “el Gobierno en principio no tienen intención de ampliar el plazo”.