La razón ha sido que “tras más de un mes negándose, ha abonado las deudas acumuladas con sus ex trabajadores tan solo una hora después de hacerse pública la denuncia”, explica IU.
Esta actitud demuestra “la mala fe demostrada por esta empresa y la falta de respeto que demuestra hacia su plantilla. Las denuncias hechas públicas por IU son ciertas y así queda demostrado por la claudicación de la empresa”.
Sin embargo, para IU, lo más importante es “haber demostrado que la unión de los trabajadores, el uso de las Leyes y la razón de la dignidad para cobrar por un trabajo bien hecho, sin tolerar el abuso de quien se cree por encima del bien y del mal, permite que los abusos empresariales se deshagan como azucarillo. Animamos a cada trabajador y trabajadora que vea sus Derechos pisoteados a rebelarse y luchar”.