El presidente se ha dirigido al PP y al Gobierno y les ha retado que aunque sigan poniendo “todos los obstáculos posibles”, “no podrán impedir que el pueblo acabe votando”. Eso sí, no ha especificado si en una consulta, el 9-N, o en unas elecciones plebiscitarias, antes de las municipales de mayo del año que viene.
Mas se ha mostrado firme en seguir adelante con el proceso, pero a los independentistas les ha recordado que no lo hará de cualquier manera y que su intención es cumplir la ley. “Solo leyendo la historia”, ha dicho, se puede concluir que “la desobediencia no siempre lleva a la victoria”. “Aprendamos de la historia”, le ha emplazado a los diputados de CUP, que le piden que ignore la suspensión del TC y solo escuche a la calle. “Muchas conquistas se han conseguido con desobediencia, pero no estamos en ese punto”, ha añadido. “Pedimos al TC, ha rematado, que vaya rapido para levantar la supension y podamos organizar todo”. Mas tiene previsto reunirse en las próximas horas y días con los cuatro partidos que impulsan la consulta para consensuar la respuesta al TC.
Mientras, CiU, ERC, ICV y CUP, los cuatro partidos soberanistas que apoyan la consulta, han ignorado esta mañana la suspensión cautelar decretada por el TC de la ley de consultas y el decreto de convocatoria, y han votado a favor de la elección de los siete miembros que integrarán la Comisión de control del 9-N, un organismo que hará las veces de junta electoral. PSC, PP y Ciutadans se han negado a votar, ya que consideran que participando desobedecían la providencia del TC. El PP ha anunciado que llevará a la Fiscalía a los diputados que han votado en esta comisión.