«Qué vergüenza. ¿Cómo salimos ahora de casa?»

Una familia completamente rota por el dolor, que no encuentra explicación para entender la atrocidad cometida por este minero jubilado que actualmente se encontraba inmerso en un tratamiento de quimioterapia para combatir un agresivo cáncer de pulmón.

Están completamente destrozados. Su madre, sus hermanas y sus sobrinos son vecinos de toda la vida y que hoy están completamente avergonzados, señaló David Fernández, que ha tendido la mano a esta familia que no tiene por qué avergonzarse ya que ellos no han hecho nada.

Un sentimiento que también trasladaron al concejal Víctor Álvarez con los que comparte una amistad desde hace años. Son gente del pueblo que lleva años viviendo aquí y ahora es importante estar con ellos porque es muy duro lo que les espera.

Roberto y Juani tenían dos hijos en común, el varón hijo de una relación anterior de la víctima, que actualmente residían en Gijón y Ávila.